ANÁLISIS BD - El Bayern es mucho más que James y Lewandowski

Octava semifinal consecutiva de Champions para el Real Madrid, y de nuevo el Bayern de Múnich se interpone en el camino a la orejona. Empezó la temporada con Ancelotti en el banquillo pero tras una serie de decisiones, y sobre todo de resultados (3-0 derrota ante el PSG), decidieron sustituirle por Jupp Heynckes, ex-entrenador blanco que ganó la Séptima.

Desde su llegada al banquillo alemán, el Bayern parece otro. Ha vuelto a barrer en la Bundesliga, de hecho ya es campeón a falta de varias fechas para que finalice el campeonato. Con 20 puntos de diferencia y el título en el bolsillo su objetivo no es otro que el triplete, que pasa, principalmente, por ganar la Champions. Para ello tendrá que derrotar al Real Madrid, su bestia negra en los últimos años en Europa.

¿Qué cambió con Heynckes?

El entrenador germano renovó la táctica de Ancelotti. Sus decisiones clave han sido poner a Javi Martínez de pivote y no de central, como hacía el técnico italiano. Dio libertad a James, que es el principal jugador creativo del equipo. 

PUNTOS DÉBILES

Todo equipo por muy grande que sea tiene sus puntos débiles. Los centrales del Bayern son el único punto débil del club germano. Boateng y Hummels son muy buenos cuando tienen que sacar el balón jugado desde atrás pero con jugadores como Cristiano o Benzema sufrirán mucho, como ya se vio la temporada pasada.

PUNTOS FUERTES

Como no podía ser de otra manera, James y Lewandowski lideran al equipo. El colombiano fue irregular durante la primera parte de la temporada, pero con la llegada de Heynckes cambió su papel radicalmente en el equipo. De Lewandowski poco se puede decir, ya que sigue siendo el mismo goleador de todos los años, Ramos tendrá que estar muy atento con él. Müller vuelve a dar miedo. Tras varias temporadas en las que no encontraba su mejor forma, su posición de interior le ha devuelto a su mejor momento. Ribery y Robben pueden ser claves saliendo del banquillo o incluso como titulares. En el centro del campo rebosa la calidad con jugadores de la talla de Thiago o Vidal. 

En definitiva, el peor rival posible para levantar la tercera consecutiva en Kiev.