El papel de Isco: cuatro técnicos y una misma sensación

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Pasan los años y aquel verano del 2013 en el que Isco fichaba por el Real Madrid queda muy lejano. Venía de deslumbrar en Europa con el mejor Málaga de la historia y de ser una de las mayores promesas del fútbol mundial. Desde el principio, su enorme talento le permitió ganarse el cariño de la afición. Nadie puede discutir ni su calidad ni la aportación realizada en forma de títulos desde que viste de blanco, pero siempre le ha perseguido la sombra de la titularidad.

Cuatro entrenadores, Carlo Ancelotti, Rafa Benítez, Zinedine Zidane y Julen Lopetegui, le han dirigido y la sensación es que para ninguno de ellos ha sido titular indiscutible. Al menos por el momento. La ‘bbC’, inamovible para muchos, limitaba su protagonismo. Tan sólo las continuas lesiones de Gareth Bale u otras ausencias le permitían, sumado a su buen hacer, entrar en el equipo titular en momentos decisivos.

Ahora, con Julen Lopetegui al frente del banquillo, su gran valedor en la Selección, todo hacía presagiar que Isco podía ser, al fin, pieza clave en el esquema del técnico vasco como ya lo había sido en el combinado nacional. A todo ello, había que sumar la repentina salida de Cristiano Ronaldo a la Juventus, que dibujaba un escenario completamente distinto al vivido en los últimos tiempos.

En lo que va de temporada, todavía no ha completado un partido entero con el Real Madrid. Ha sido titular ante el Getafe, fue el primer cambio, y en Girona, donde también fue sustituido. Un año más, los síntomas son parecidos. Mientras tanto, el malagueño seguirá peleando por obtener un rol que, sin duda, merece. El míster decidirá, el jugador parece estar tranquilo.