El Real Madrid puso la guinda al pastel con su triplete en Dubai
Dubai fue la última estación gloriosa para un Real Madrid que quedará en los anales de la historia. El conjunto blanco cierra el círculo siendo el gran triunfador de la gala Globe Soccer Awards, donde consiguió su particular triplete al acaparar los premios al mejor club, mejor entrenador (Zidane) y mejor jugador (Cristiano Ronaldo). Una guinda a un pastel de cinco sabores: Liga, Champions League, Supercopas de España y Europa y Mundial de clubes.
Jamás los blancos habían levantado un quintete en un año natural y Zidane lo consiguió. La sonrisa cómplice del entrenador francés hizo de anfitrión en la majestuosa gala emiratí a la que faltó Cristiano, al que su paternidad resta tiempo y protagonismo. Ya se sabe que el tiempo lo cambia todo. El blanco reinó en la gala de clausura del año deportivo futbolístico. "Este premio significa que las cosas funcionan", afirmaba un Zinedine que agradece cada día que pasa al mando del transatlántico merengue.
El Real Madrid disfruta del pasado, regocijándose de sus éxitos, y, en la línea pronunciada por un Zidane que dobló discurso, mira con tranquilidad a un presente grisáceo por la contundente derrota ante el Barça en un partido nuclear que amenaza un futuro que apuntaba al sextete en agosto. A pesar de la falta de eficacia de cara al gol, el debate sobre Benzema o la suplencia de Isco y el runrún en la grada, en la 'Casa Blanca' hay total tranquilidad sobre el proyecto edificado en torno a la mística figura de Zinedine. A pesar de los 14 puntos, con un partido menos, Zidane ha transmitido a su círculo interno que se ven capaces. Ya fue capaz de recortar 11 puntos en medio año, cuando tomó las riendas de este ilusionante viaje. Ahora, le espera un reto mayúsculo para seguir insuflando aire al codiciado sextete, y seguir citándose con el reconocimiento otro diciembre en Dubai. ¿Por qué qué sería de este Real Madrid sin retos de semejante calibre?