El trabajador silencioso: Nacho merece un trato justo del Real Madrid y de Zidane

Bernabeudigital.com

La casi segura marcha de Pepe al fútbol chino va a crear un vacío en el vestuario del Real Madrid muy difícil de llenar. La cercanía del portugués, su experiencia, su capacidad de unir al vestuario y, sobre todo, su tremenda calidad no serán fácilmente sustituibles. Desde que llegó al Real Madrid al en 2007 ha demostrado una sobriedad defensiva notable  y una competitividad abrumadora. En mi opinión, salvo este curso, ha sido el mejor central del mundo en los últimos años.

Felipe (Porto), Musacchio (Villarreal) u Otamendi (Manchester City) son algunos de los defensas que, según la prensa, sigue el Real Madrid para suplir a Pepe. Ninguno tiene la capacidad de abarcar campo y salir al corte con 40 metros a la espalda. Quizá sea esa, además del poderío aéreo y la salida de balón, las tres virtudes que mejor debe cultivar un central en el Madrid. De los tres candidatos, ninguno cumple sobradamente dos. Sin embargo, Zidane sí tiene un futbolista que realiza esas tareas y, como añadido, es canterano, español y polivalente: Nacho Fernández.

Sería una falta de respeto traer a alguien de fuera visto el excelente rendimiento de Nacho. Durante muchos años ha sido quinto o cuarto central, ahora ha logrado ser el tercero y sería injusto quitarle todo lo que ha ganado con trabajo silencioso. El Madrid debe ser consciente del tremendo futbolista que tiene en su plantilla y no distraerse con fichajes inexplicables. Jesús Vallejo es el que debe ocupar la tradicional plaza de Nacho como cuarto central y hombre para todo. Él sí necesita formarse y su suplencia no acarrearía ningún problema en el vestuario.