El 'Virus FIFA' desvirtúa las competiciones

Bernabeudigital.com

Los parones ligueros (y no de selecciones, porque lo que se frena son las competiciones de clubes), acarrean un sinfín de inconvenientes. Más allá de resultar anodinos para la mayoría de espectadores que una vez enganchados al jugo de clubes ven frenadas en seco sus ilusiones, obligan a efectuar kilométricas odiseas insalubres a los futbolistas, además de las múltiples lesiones que se cobra al año, perjudicando a las entidades que son quienes ingresan el salario a sus futbolistas religiosamente.

James ha sido el último en el Real Madrid, pero lo sufren todos. Esta pandemia futbolística no suele dejar títere con cabeza, pero es evitable. No solo desvirtúa las competiciones de equipos con los múltiples contratiempos físicos que ocasiona, sino que hace lo propio con las pugnas entre naciones al ser envites que se fraguan muy de cuando en cuando y con futbolistas que no son siempre los mismos ni tampoco su estado de forma, lo que permite un mayor margen de maniobra para las selecciones transatlánticas y punteras. 

¿La solución? Tal vez esté en reducir los días de asueto de los protagonistas y reservar un mes anualmente para resolver los preliminares clasificatorios, tal y como se hace después con los torneos finales, bien Eurocopa o Mundial. En la vorágine en la que vive instaurada el balompié fruto de un mundo cambiante, acabar con los frenazos puede ser una de las acertadas modificaciones del futuro.