ANÁLISIS BD - Los suplentes también juegan y piden minutos
Anoche el Real Madrid demostró en Butarque que también dispone de un banquillo de garantías capaz de hacer que no se noten las ausencias de los titulares. Zinedine Zidane tiene a los suplentes en un estado de forma excelente y no bajaron el nivel de los más habituales. Sin duda, eso habla mucho y bien de la labor del francés al frente del conjunto blanco al ser capaz de tener una plantilla siempre difícil cómo es la del club madridista y que estén todos igual de enchufados y comprometidos.
Vimos como Lucas Vázquez, Álvaro Morata, Marco Asensio, James Rodríguez y Mateo Kovacic cuajaron una actuación sensacional frente al Leganés. Apenas se notó que Cristiano Ronaldo, Toni Kroos y Gareth Bale estuviesen en la grada y qué Luka Modric y Karim Benzema viesen el partido desde el banquillo. Kovacic sustituyó a su compatriota a la perfección llevando a cabo las labores de creación. Asensio estuvo exquisito con regates y caños descomunales demostrando la gran calidad que atesora y su tremendo potencial. El delantero de la selección española mostró sus dotes para marcar y se fue de Leganés con el balón, ya que anotó un hat-trick. Lucas Vázquez se recorrió innumerables veces la banda creando también muy buenas jugadas. Todos demostraron que el banquillo también juega, colabora y está sediento de minutos.
La otra cara de la moneda fue el colombiano, ya que tras marcar un gol y hacer un partido aceptable, Zidane le cambió, lo que no sentó nada bien a James que terminó enfadado y golpeando el banquillo incrementando los rumores de su marcha y de su descontento en el Real Madrid.