ANÁLISIS BD - Un Madrid de autor: los tres mantras de Lopetegui

25.08.2018 13:01 de  Javier Martín Prieto  Twitter:    ver lecturas
ANÁLISIS BD - Un Madrid de autor: los tres mantras de Lopetegui
Bernabeudigital.com
© foto de J.M.Colomo

El Real Madrid olvidó el batacazo de la Supercopa de Europa ante el Atlético ganando por 2-0 al Getafe en el estreno liguero del club y de Julen Lopetegui en el banquillo del Santiago Bernabéu. Una victoria solvente pero sin demasiada brillantez en la que pudimos pudimos seguir viendo algunas pinceladas propias de los rasgos de autor que intenta implantar el técnico y por los que quiere que se caracterice su equipo. Además, consiguió dejar la puerta a 0 por primera vez.

Quiero un equipo ambicioso, solidario y con confianza en nuestras condiciones”, fue la declaración de intenciones de Lopetegui el día de su presentación. A lo largo de estos seis partidos hemos podido ver que su propuesta se asienta sobre tres mantras: posesión, presión alta y movilidad. Tres premisas que pudimos ver en la Selección y que pudimos atisbar en el primer partido de pretemporada y que ha continuado practicando el conjunto blanco hasta este sexto partido.

Lopetegui quiere un Madrid protagonista a partir del balón. El cuero es la materia prima del equipo con el objetivo de que tenga de esta manera un mayor control de los partidos, hándicap del Madrid de Zidane, abonado al vértigo y al descontrol. Fue elocuente con la alineación. Una declaración de intenciones, con tres medios eminentemente técnicos escalonados para favorecer una salida limpia de balón y laterales largos y en campo contrario para favorecer la amplitud. En los cinco partidos anteriores la posesión de balón del conjunto blanco no bajó del 65% y ante el Getafe alcanzó su culmen/fue llevada al extremo, con un 78%. Clinic de precisión del Madrid, con un 91,4 %. Kroos, su mariscal, se erigió como centro neurálgico de este estilo de juego ejerciendo desde el pivote con la ausencia de Casemiro. El alemán se agranda con el balón y así lo demostraron sus números, que hablan de un clínic de precisión. Completó el 98% de sus pases ante el Getafe (116 de 118), el porcentaje más alto de un jugador del Real Madrid en un partido de LaLiga con al menos 100 pases intentados, desde la 05/06.

“Tratamos de atacar bien con la pelota, si la tenemos sufrimos menos, pero no nos conformamos solo con tenerla”. Una posesión que se aleje de lo estéril, con veneno. La circulación debe ser rápida, algo que se ve retroalimentado por la constante movilidad, otra de las premisas. Algo que se comprueba en la mutabilidad del sistema. Un 4-3-3 adaptable a un 4-4-2 o un 4-3-1-2 gracias a la constante permuta de los atacantes. Asensio es el jugador bisagra gracias a su versatilidad. Como se puede ver en las posiciones medias, el balear ocupó mayoritariamente la zona del 10, casi pisándose con Benzema, tuvo mucha libertad. Bale quedaba más libre, calcando el papel de Cristiano en la otra banda. Mucho más vertical que con Zidane. Además, pudimos ver como el Madrid volcó el juego mayoritariamente por la banda izquierda, donde buscaba la superioridad con las subidas de Marcelo y sus triangulaciones con Isco, Asensio y un Benzema que tiende a revolotear fuera del área. 

Pero para monopolizar el balón se debe recuperar cuanto antes. “Siempre queremos intentar recuperar la pelota lo más rápido posible, es lo que queremos transmitir”. Para el técnico es innegociable la presión alta y reactiva tras pérdida. Para ello quiere un Madrid instalado permanente en campo contrario, como demuestran que 8 de las 11 faltas que cometió fueron en campo del Getafe. La consigna es un equipo corto y compacto, con una línea defensiva muy alta que tira Ramos, favorecida por la velocidad del camero y Varane, e intenso y solidario en el esfuerzo para efectuar una efectiva presión coral con el objetivo de ahogar la salida del balón rival y recuperar lo más cerca del área. Así llegó el segundo gol. En una de esas 13 recuperaciones del Madrid en campo rival, Asensio encima a Djené en su propio área y le roba el balón para ceder a Bale, que remata de primeras. De esas 13, Isco, Benzema y Asensio robaron 2 cada uno,mostrando que son los primeros en ponerse el mono de trabajo. “Debemos sumar esfuerzos en lo defensivo y ofensivo. La suma de solidaridad nos hace mejores”. Un contexto que sobre todo potencia las fortalezas de sus atacantes: la verticalidad y la velocidad de combinación de Bale, Benzema y Asensio.