Alemanes, preparaos para caer

Ya está aquí. Ese aroma que impregna el Bernabéu solo se da en las grandes citas de la competición que ha llevado al Real Madrid a ser el mejor equipo del Siglo XX. Durante toda una temporada, el feudo blanco espera con ansia la llegada de abril para que vuelvan las grandes noches europeas, esas que recuerdan con regocijo los mayores del lugar. Lejos queda ya la maldición de octavos, los Lyon, Roma o Liverpool que apeaban a los blancos de su competición demasiado pronto.

Y de nuevo, los vikingos tienen delante al Dortmund, su bestia negra la pasada temporada y el equipo que les apeó de poder estar en la final celebrada en Wembley y en la que ya esperaba el Bayern. Cierto es que en nada se parece al equipo del año pasado. La marcha de Götze, la ausencia de Lewandowski y la gran cantidad de bajas por lesión hacen del equipo de Klopp un conjunto menos peligroso sobre el papel pero al que hay que tener respeto, precisamente por ese 'gafapasta' que puebla el banquillo germano y que para el que escribe sería entrenador digno de sentarse en el banquillo local de la Castellana.

Muchos hablan de venganza, pero la eliminatoria de cuartos es mucho más que un simple choque ante el Dortmund. Es el momento de dar un golpe encima de la mesa tras el varapalo sufrido en Liga, el momento de ir todos a una hacia el mismo objetivo y el momento de olvidar todo tipo de debates o críticas hacia jugadores, porque si algo he aprendido con el tiempo, es que cuando el madridismo está unido, como uno solo que tira del carro, es capaz de lo imposible.

Ese imposible que parece haberse instaurado, por cierto, en otro histórico de la competición, el Manchester. El equipo de Moyes era la cenicienta -por méritos propios, todo hay que decirlo- de los cruces en el sorteo de cuartos y ha sabido plantarle cara al todopoderoso Bayern, que ya no tiene otra cosa que hacer en la temporada que centrarse en Europa tras ganar la Liga en 28 jornadas -ríete tu de la "Liga bipolar" en España-. Sin Van Persie -el 40% del United-, los diablos rojos se marchan con un 1-1 en el marcador que deja todo abierto para la vuelta. Es probable que el Bayern acabe destrozando al Manchester en el Allianz, pero si hay algo claro es que el Manchester -y por ende el Real Madrid- tiene un gen único en su ADN que aparece donde otros solo ven imposibles.

Por último, si hay algún jugador que sabe lo que significaba el Real Madrid, ése era Juanito. Hoy, 2 de abril, se cumplen 22 años de su trágica marcha. La fatídica noche del 2 de abril de 1992 nos abandonaba el que para muchos es el símbolo del madridismo, aquel jugador que marcó a una generación y que siempre será recordado en el minuto 7 en el estadio madridista. Hoy más que nunca, el mejor homenaje posible es acabar con los germanos de una vez por todas y volver a demostrar quién manda en Europa.

autor

David Marcos

Conmigo quién quiera, contra mí quién pueda". Un día me hice seguidor del Real Madrid y desde entonces he disfrutado de pasillos, carreras eternas hasta el banquillo para celebrar un gol o voleas gloriosas. Sin embargo, siempre queda en el tintero todo aquello que el tiempo no te ha dejado disfrutar. Por los que se fueron, que no volverán, pero jamás se marcharán.

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