Una liga no se gana por fallos arbitrales

Bernabeudigital.com

Desde Barcelona siguen ensuciando el tejado del Real Madrid asegurando que el VAR y los árbitros favorecen al conjunto blanco y que por ello lideran la clasificación. Sin embargo, esa estrategia no deja de ser una cortina de humo para tapar los malos resultados del Barça, la mala gestión de su directiva, el revuelo con Griezmann, Setién, Éder Sarabia, la venta de Arthur... Los argumentos que ofrecen desde Cataluña se caen por su propio peso. Solo hay que recordar el clásico del Camp Nou donde ni el colegiado ni el videoarbitraje vieron, o quisieron ver, los dos penaltis sobre Varane. Un día el VAR y los árbitros pueden favorecer en alguna decisión a un equipo, pero a la semana siguiente puede ser al revés. Como le ha pasado al Celta. Frente al Mallorca les pitaron un penalti en contra que era totalmente inexistente y a los pocos días ante el Betis, el árbitro les perdonó un penalti clarísimo de Rafinha sobre Guardado.

Por eso, decir que el Real Madrid es líder gracias al VAR y a los árbitros... es una memez. Una liga de 38 jornadas no se gana por fallos arbitrales. El título liguero es sinónimo de regularidad y de constancia, no de fallos puntuales. El conjunto blanco es líder porque lleva 23 victorias, ocho empates y tres derrotas. O lo que es lo mismo, cuatro puntos más que el Barcelona. Y si LaLiga que conquistó el Barça en la temporada 2015-2016 con 19 penaltis a favor fue vista como fruto de esa regularidad y constancia necesaria para levantar el título, esta en la que el Madrid lleva nueve, pues más aún. Además, solo mirando los datos ya se desmonta la sucia estrategia culé: sin el VAR, el Real Madrid seguiría sacando 4 puntos al Barcelona.