Raúl confunde el señorío del Real Madrid. Nacer, matar y morir por una idea y nunca dejar puertas abiertas

28.03.2017 10:00 de  Pipe Olcina  Twitter:    ver lecturas
Raúl confunde el señorío del Real Madrid. Nacer, matar y morir por una idea y nunca dejar puertas abiertas
Bernabeudigital.com
© foto de Filippo Gabutti

Ser embajador de la Liga para una persona como Raúl, no es tarea fácil. Dentro de lo políticamente correcto, el excapitán y leyenda madridista siempre ha sido el hombre que ha apaciguado las aguas, cuando éstas bramaban. Salvo aquel episodio silenciando el Camp Nou, ha sido el ejemplo dentro y fuera del campo.

Sin una tarjeta roja en su trayectoria como profesional, sin una mala palabra y sobre todo, sin conocer la palabra rendición. Durante sus años vestidos de blanco, Raúl González Blanco ha sido el ejemplo del madridismo. El niño de la capital que convivió con 'Los Galácticos'. El Ave Fénix que siempre revivía de sus cenizas. Era la esperanza en tiempos de crisis. 

Ahora bien, en su función como embajador y tras muchas semanas sin enfundarse la elástica, parece haber olvidado la rivalidad. Siempre dentro de lo políticamente correcto, primero con la fotografía de los alevines del Barcelona, tiempo después con el mensaje a Leo Messi que no hubo a Cristiano y ahora, con esas declaraciones dejando una puerta abierta que nunca debió de abrir. Raúl debe salirse de ahí. Florentino debe reclutarlo, tiene que ser la guía de los más jóvenes del madridismo y no perderse entre los caminos de la formalidad. El señorío es nacer, matar y morir por una idea y nunca dejar puertas abiertas.