2014, el año de Carlomagno
El Real Madrid cumplió y alzó el Mundial de Clubes para poner fin a un 2014 histórico. Los blancos se sobrepusieron a las patadas de San Lorenzo y a la ineptitud de Walter López para lograr su cuarto título. El equipo de Ancelotti se comerá las uvas siendo campeón de España -así denomina al campeón de Copa-, de Europa y del mundo. La reconquista ya es un hecho, el ciclo madridista está en pleno apogeo.
Ancelotti ha llevado al Madrid hasta la conquista de Europa primero -doce años después del último título- y del mundo después -logrando un trofeo que nunca había disputado en su actual formato-. El triunfo del italiano es el del buen hacer, el de la paciencia y el del trabajo en silencio. Sin dar grandes titulares don Carlo, 'El Emperador', ha conseguido entrar por la puerta grande en la historia del Real Madrid.
¿Y qué decir de don Sergio Ramos García? Su cabezazo en Lisboa propició la 'Décima'. Ya antes había sido clave en la semifinal contra el Bayern, pero ese minuto 93 nunca se borrará de la retina de todos los madridistas. El central volvió a aparecer en Marrakech para marcar el primer gol en los dos partidos del Mundial de Clubes. Más que merecido ese premio al mejor jugador del torneo, pero lástima que su gran año no se haya visto recompensado con su presencia entre los tres finalistas al Balón de Oro. Los contratos publicitarios del discreto Messi mandan, pero Sergio Ramos hubiera sido un digno acompañante de Cristiano Ronaldo en el podio de Zúrich.
El Papa es de San Lorenzo, pero Dios es portugués y el mundo del Real Madrid.