Benzema, un gato salvaje
Karim Benzema está ante, posiblemente, su mejor temporada desde que llegó al Real Madrid. El francés ya acumula 19 goles en Liga y se convierte, junto a Cristiano Ronaldo, en el máximo artillero de los blancos y sigue en la lucha por el Pichichi y la Bota de Oro. A pesar de todos los problemas extradeportivos por los que está pasando, Benzema ha demostrado que ya no es el gatito de años atrás. Ahora, más que nunca, es un gato salvaje que espera agazapado en el área a su presa.
El éxito de Benzema es el de Zidane y el del propio club blanco. El galo se ha visto respaldado desde que saltara a la luz pública el Caso Valbuena. En el Real Madrid creen en su inocencia y, a falta del veredicto del juez, han apoyado a su jugador en el peor momento de su vida. Criticado y ya hasta condenado por muchos, el delantero ha renacido de sus cenizas para demostrar su valía y su importante rol en el conjunto merengue.
El fútbol debe centrar únicamente los pensamientos de Benzema. Con profesionalidad y entrega no tiene techo. A pesar de los rumores sobre el posible fichaje de Lewandowski y las dudas sobre su futuro en la capital de España una vez se conozca el dictamen judicial de la causa en la que está acusado, el internacional francés tiene que mostrarse tranquilo y hacer lo que mejor sabe: meter goles. Su calidad es exquisita, ahora solo falta que continúe demostrando madurez y cabeza para no volver a caer en la trampa y convertirse en el cazador cazado.