Olympiacos 78-79 Real Madrid: la Undécima contra todo y contra todos

¡Final en Kaunas! El Real Madrid hace historia en Kaunas contra todo y contra todos, con un esfuerzo increíble de todos los jugadores, en especial de los viejos rockeros como Sergio Llull, que anotó el tiro ganador, y de Sergio Rodríguez, que sacó toda su calidad para mantener el encuentro a flote. Mario Hezonja reboteó como nadie y estuvo desacertado en ataque, pero eso dio igual, pues Fabien Causeur le suplió de la mejor forma posible en el triple, y Rudy Fernández luchó cada balón como si fuera el último. Historia blanca, de nuevo, que tuvo que luchar contra los cinco elementos y la propia organización para llevarse la Undécima Copa de Europa.

En estas primeras posesiones del primer cuarto se vio a dos equipos muy igualados, aunque Isaiah Canaan ametralló al Real Madrid desde los triples, y eso se notó, pues los blancos no consiguieron arbolar buenos ataques en este comienzo. No obstante, la primera gran ventaja se la llevó Olympiacos, gracias a buenas defensas y tiros exteriores en la otra zona de la cancha. Asimismo, Chus Mateo trató de cambiar el rumbo del encuentro con la entrada de Sergio Rodríguez, Mario Hezonja y Fabien Causeur, aunque no se notó en un principio. Fue Rudy Fernández quien anotó una jugada de tres puntos para acortar la desventaja a solo nueve puntos, pero la sensación era negativa, pues el sistema ofensivo no consiguió acoplarse al encuentro. El croata, de todas formas, anotó una gran última jugada en el poste antes de finalizar este periodo, y se acabó mejor que como se empezó.

En el segundo cuarto, el inicio fue de un ida y vuelta constante, aunque el Chacho destacó por encima de todos, con un gran movimiento de balón y rompienso a la defensa griega, aunque la efectividad brilló por su ausencia en varios tiros liberados. Aun así, el quinteto propuesto por el entrenador madrileño funcionó gracias a la zona 2-3, que ningún equipo consiguió leer de forma correcta. El canario dio aire fresco al ataque blanco, muy rápido gracias a la buena distribución del base, muy inteligente al leer los espacios. Anthony Randolph, que suplió a Edy Tavares para darle descanso, anotó un triple en su primera jugada, y Hezonja se unió posteriormente con otro lanzamiento exterior y un mate tras recuperación en defensa. Dzanan Musa, más desaparecido en el primer cuarto, se unió a la fiesta con otro más, aunque los griegos respondieron inmediatamente con dos buenas jugadas consecutivas, y el encuentro se empató completamente hasta el tercer cuarto.

Tras el paso por vestuarios, el Real Madrid anotó un triple para coger la ventaja, aunque Canaan respondió desde la esquina completamente liberado, ya que la defensa no se enteró de las rotaciones griegas en ataque. Los árbitros entraron a escena con varias decisiones muy cuestionables, que en cualquier caso beneficiaron a los griegos. En cuanto al ataque, los de Chus Mateo no encontraron los espacios ni tampoco una buena circulación de balón, por lo que entró el Chacho. Nigel Williams-Goss impulsó la energía necesaria en estos malos minutos para anotar cinco puntos consecutivos gracias a un buen 'spacing'. Los griegos se fueron con ventaja al último cuarto, y con mejores sensaciones que los madridistas.

Los últimos diez minutos comenzaron muy mal para el Real Madrid, que desconectó en defensa y en ataque se le acabaron las ideas, aunque Causeur respondió al triple de Sasha Vezenkov con otro más, aunque todo se veía muy negro, pues también la influencia de los árbitros fue muy palpable en la diferencia de faltas. Chachismo ilustrado de nuevo en el parqué de Kaunas con una jugada de tres puntos que aprovechó, aunque la desventaja de cuatro seguía presente en el electrónico. De nuevo los de naranja comenzaron a regalar el encuentro a Olympiacos, que se vieron con el título europeo en las manos, pues los madridistas no encontraron ningún buen ataque. Sergio Rodríguez, anotó un auténtico triplazo para poner a solo -1 a los suyos, que les quedaba la última jugada para decidir quién se llevaría el título. ¡Cómo no vas a confiar en Sergio Llull! Vaya tiro de media distancia de auténtica clase para poner el +1 a falta de solo 3.1 para el final del partido. La jugada, con un doble bloqueo entre Hezonja y Tavares , fue clave para poder dar el mínimo espacio en esta canasta. La defensa fue ideal ante Kostas Sloukas, y los blancos se llevaron una Euroliga de infarto.