Real Madrid 80-72 Olympiakos: esfuerzo titánico con premio final

El triple de Facundo Campazzo dio comienzo al partido de Euroliga ante Olympiakos con la clara misión de ganar para evitar la eliminación en estos playoff. Posteriormente llegó Dzanan Musa para anotar otro más y provocar una falta antideportiva cometida por Kostas Papanikolau, y aprovechó los dos primeros tiros libres del encuentro. Respondió rápidamente Nigel Williams-Goss con un lanzamiento exterior de libro, pero el Real Madrid se plantó muy bien en la contienda con mucho carácter y seriedad en el juego. Los griegos también reaccionaron gracias al buen hacer del base exmadridista, que aglutinó todos los puntos de su equipo, pero los blancos cerraron muy bien este primer cuarto.

Para el segundo cuarto, Serge Ibaka puso un tapón espectacular a Shaquielle Mckissic, aunque el Real Madrid se diluyó con la rotación suplente y sus diversos errores en el lanzamiento. Sin los anotadores exteriores y la aparición de los árbitros Difallah y Belosevic a favor de Olympiakos, los de Chus Mateo bajaron el ritmo y no pudieron aguantar la ventaja con la comenzaron este pariodo, y es que los madridistas adolecieron de la ausencia de Mario Hezonja y de Musa, claves en los primeros diez minutos de juego. La segunda unidad no funcionó, pero los blancos comenzron a carburar cuando los de naranja empezaron a pitar los contactos de los visitantes, ya que se les había olvidado que existían. Volvió el croata a cancha e hizo lo que mejor sabe: anotar desde el poste. Con todo ello, la marcha a vestuarios se dio con una sonora pitada a los jueces de esta contienda, y con mucho que mejorar de cara a la segunda mitad.

Tras el paso por vestuarios, el Real Madrid anotó la primera canasta al contraataque con una bandeja de Musa, y es que el quinteto del primer cuarto repitió en este tercero. Hezonja también fue importante, ya que el croata le regaló una asistencia para un mate fácil a Edy Tavares, a la vez que la empujó de espaldas hacia abajo tras un robo que él mismo logró. Primer parcial a favor en tres minutos, y con mucho que luchar. El paso de los minutos igualó todavía más el encuentro, y cada posesión era clave para poder sacar esta contienda adelante. el '11' balcánico se puso el mono de trabajo anotando un triple espectacular desde la esquina. Aun así, Difallah y Belosevic también hicieron lo propio dando por válida una canasta de Sasha Vezenkov que estaba muy clara fuera de tiempo. El ritmo bajó, y ya solo quedaban diez minutos para hacer la machada contra todo.

Último cuarto para hacer historia contra Olympiakos y toda la organización de la Euroliga. Pues bien, Usman Garuba demostró su infinita calidad con un reverso en el poste alto y aprovechó la diferencia de altura en el emparejamiento con Luca Vildoza para forzar una jugada de tres puntos que aprovechó a la perfección. Con un ida y vuelta constante en los primeros diez minutos, el Real Madrid prevaleció gracias a los robos en cada posesión, y con siete unidades de ventaja los madridistas se marcharon casi al ecuador de este periodo. Igualdad arbitral en los contactos, con un baloncesto muy físico, y ahí sacó varias cosas positivas los de Chus Mateo, que igualaron en esfuerzos y acierto a los pupilos de Georgios Bartzokas.

Sin embargo, Vezenkov tuvo algo que decir asl respecto y con seis puntos consecutivos volvió a devolver la esperanza a los griegos. Los últimos minutos fueron de infarto, ya que el Real Madrid cedió la ventaja tan costosamente lograda gracias a un esfuerzo titánico de la segunda unidad. Aun con todo ello, los de Chus Mateo ejercieron una presión a toda pista para explicar a Olympiakos que no iban a ceder en casa bajo ningún concepto. Y así fue, con los blancos sacando la victoria bastante meritoria y mandando la eliminatoria al cuarto encuentro de este jueves a las 21:00 en el Movistar Arena.