Bajar los brazos, no es una opción
Tras diez jornadas, el Castilla tan sólo ha podido lograr una única victoria por nueve derrotas. El equipo tiene interiorizado el estilo a desarrollar, pero los goles no llegan, y por tanto tampoco las victorias. Sin embargo, aún quedan 30 jornadas de campeonato, 90 puntos en juego, un enorme camino hasta el final. No es el momento de que el equipo baje la cabeza, y hay motivos para creer en la recuperación.
El elenco de jugadores con los que cuenta Toril es inmenso. Jugadores de clase, jóvenes y con hambre de demostrar el porqué visten la camiseta blanca. Omar y José Rodríguez encabezan la lista de mediocentros que posee el Castilla a la hora de sacar el balón desde atrás. Ambos jugadores se han echado esa creación a la espalda desde el inicio de temporada, y han sabido replegar en el momento en que el equipo lo ha necesitado.
El gol, tarde o temprano, llegará
En su retaguardia, la zaga del Madrid intenta cuidar lo mejor posible a Pacheco, y a pesar del elevado número de derrotas, ninguna ha sido abultada. En ningún partido el Castilla ha recibido más de dos goles. Es más, de las nueve derrotas siete han sido por la mínima. El equipo ha estado bien plantado atrás en la mayoría de los partidos, no sufriendo un excesivo agobio por parte del rival.
De mitad de campo para adelante es donde las cosas no acaban de funcionar. Lucas, Jaime y Burgui crean profundidad por las bandas, pero el equipo no acaba de enganchar bien con la delantera, que tampoco está acertada de cara al gol. Pero ese mal fario ha de acabar. Un equipo como el Real Madrid siempre se ha caracterizado por su pegada, y si en un número de partidos esta falla, vuelve como agua de mayo.
Es el momento de que dicha puntería que fascinó a toda la Segunda División vuelva esta campaña, porque aunque hayan cambiado jugadores el gol va en el gen Real Madrid. No es el momento de que el equipo agache la cabeza y baje los brazos con 90 puntos aún por jugarse. El Castilla debe de seguir luchando y confiando en sus jugadores para salir de esta situación.