Fernando Sanz: "El Real Madrid es una incógnita porque está en una montaña rusa. Sufro más por el Málaga"

Llevar el apellido Sanz nunca fue algo fácil. Desde sus inicios en el mundo del fútbol, Fernando estuvo bajo el runrún de un sector de la afición que le vinculaba a los negocios de su padre Lorenzo Sanz. Sin embargo, el actual director de la LFP en Oriente Medio y África del Norte sigue recordando al conjunto blanco con especial cariño: “Al final fue el club que me dio la oportunidad de jugar en Primera y le debo estar muy agradecido. Tengo miles de recuerdos, aunque ganar la Champions fue indescriptible”.

Si hay alguien que conoce a la perfección tanto al Málaga como al Real Madrid ese él. Tanto, que es la única persona que solamente se ha enfundado la camiseta de ambos equipos durante 26 años en España. El expresidente del cuadro blanquiazul vivirá desde Dubai lo que podría ser el último Málaga-Madrid: “En estos partidos tengo el corazón partido, pero siempre sufro más por el Málaga que por el Madrid porque tiene menos recursos para cumplir los objetivos. Ojalá la Champions la gane”.

Tras la mediática eliminatoria ante la Juventus, los pupilos de Zidane tienen la obligación de hacerse con la segunda plaza, como mínimo. “El Real Madrid es una incógnita porque está en una montaña rusa. En Liga muy irregular, pero luego en Champions es fiable. Bueno, estar en semifinales siempre es un gran estímulo para que los jugadores afronten el próximo partido con la máxima ilusión posible", afirmó.

En 2010 oficializó la venta del Málaga CF al jeque Bin Nasser Al-Thani por 36 millones de euros. Un hecho que marcaría un antes y un después en la historia del club de la 'Costa del Sol'. Desde una cuarta plaza hasta el más que posible descenso a la ‘categoría de plata’. “En el Málaga deben reflexionar sobre lo que se ha hecho mal, no solamente ahora, sino también años atrás. Lo bueno dentro de lo malo es que tienen más tiempo que el resto de equipos para empezar a organizar la plantilla del año que viene. Ante el Madrid, la moral de los futbolistas será mínima.”, concluyó.