Al Mundialito, ¡con manguitos!
Visto el lamentable espectáculo de ayer en los cuartos de final del Mundialito de Clubes, más le vale a Carlo Ancelotti juntar en la medular a Ian Thorpe y Michael Phelps si quiere tenerlo todo controlado. La FIFA, lejos de acabar con dicho bochorno, se sentó en su poltrona a ver el partido y quién sabe si trincar un poquito de por aquí y otro poquito de por allá. Luego no se extrañen de que la culpa puedan tenerla hasta los horarios, emulando al grandioso y único Andoni Zubizarreta.
Y esa piscina en la que puede jugar en Real Madrid es ciertamente peligrosa. Los blancos viajan con el deber de ser campeones ya que ninguno de los adversarios está a un nivel alto pero un campo de fútbol convertido en una charquera no beneficia al equipo con más calidad.
Es por eso que Bale, Benzema y Cristiano tendrán que vaciarse en cada disputa y balón aéreo. Más preocupados de donde llevará el bote el balón o si se quedará en un charco que de correr y hacer disfrutar. Tampoco le será fácil a Isco, mago de la pelota, porque ni driblará ni podrá regatear.
Será importante el músculo y en eso el Real Madrid no está sobrado. En el centro del campo, habrá que esperar para saber si Khedira está interesado en jugar o sigue teniendo la cabeza en su futuro. Atrás, la seguridad que aportan Ramos, Pepe o Varane es clave para enfocar un Mundialito de pies calados.
Y sí, se me ha pasado por la cabeza ver a Carlo Ancelotti con su flotador de pato en la cintura. Un poco de humor no viene mal para encarar el domingo…