La revolución está en casa

El Real Madrid ha decidido no realizar demasiadas incorporaciones. Se esperaba un verano muy movido en las oficinas del Santiago Bernabéu pero todo hace indicar que finalmente no será así. Una vez confirmado el fichaje de Alaba, los esfuerzos se centrarán casi exclusivamente en Kylian Mbappé (en caso de que el francés no venga, el plan B se llama Haaland). 

Sin embargo, no es necesario sacar la billetera para realizar una 'mini-revolución' en el Real Madrid. Perfectamente Miguel Gutiérrez podría cubrir el hueco que deje Marcelo en el lateral izquierdo, siempre y cuando el brasileño termine marchándose este verano, algo que está por ver. En el centro del campo se puede ganar calidad y fondo de armario con la promoción de Antonio Blanco al primer equipo y con el regreso de Martin Odegaard. El noruego debe dar por fin un golpe encima de la mesa y consolidarse en el Real Madrid la próxima temporada, ya sin la excusa de Zidane. En ataque, mientras, la vuelta de Brahim también sería un refuerzo de lujo. El joven atacante ha demostrado en el Milan que ya está listo para jugar en un equipo de primer nivel.

En definitiva, el Real Madrid no tiene excusas. La revolución puede venir de la mano de 'fichajes' a coste cero como Miguel, Blanco, Odegaard y Brahim. Incluso si Ancelotti lo desea, podría tirar de Bale en su último año de contrato y de Dani Ceballos. Opciones tiene de sobra el técnico italiano, que deberá decidir en las próximas semanas quiénes entran en sus planes y quiénes no. Todo ello, evidentemente, a la espera de que se confirme el galáctico: Mbappé o Haaland.