Isco y diez más
Isco Alarcón lleva dos meses sumergido en una resurrección futbolística que le ha llevado del ostracismo casi total con Zidane, eclipsado por Valverde, el impresionante Kroos y el siempre brillante Modric, a un papel fundamental en la elaboración de juego madridista. Ante el Barcelona, el del Arroyo exhibió, además de la calidad que sabemos que tiene, la capacidad de trabajo que tantas veces le ha hecho ganarse un puesto en el once titular del francés durante otras etapas.
El centro del campo madridista probablemente sea uno de los mejores del mundo. Ahora parece que hay cuatro plazas disponibles y parece que solo un fijo, Casemiro. Kroos y Modric lo eran hasta ahora pero 'Zizou' sorprendió dejando al alemán fuera del encuentro ante el City, y al croata lo mismo frente al Barça. Valverde está de nuevo espectacular y lo mejor es que la profundidad de la plantilla blanca le permite a Zidane precisamente eso, rotar sin tener miedo a perder calidad.
Isco vuelve a ser capital, y lo habría sido más todavía contra los de Setién si su latigazo a la escuadra no hubiera sido desviado por un espectacular Ter Stegen. Juega, hace jugar, y lo más importante, levanta al Bernabéu como tantas otras veces. Alarcón cayó de pie en el templo desde el primer día, y tras varias etapas de idas y venidas, parece que vuelve a encontrar su sitio.