Rodrygo, el ejemplo perfecto de la falta de exigencia en el Real Madrid

El madridismo vive uno de los momentos más extraños de su historia reciente. No digo malo, puesto que a pesar de todo no se ha hecho el ridículo en todas las competiciones. Son sensaciones muy raras las que ha ido sintiendo el aficionado del Real Madrid. La temporada comenzó de la mejor forma posible, con un título y con una gran conexión entre Mbappé y el resto de los delanteros. Sin embargo, pronto empezaron a evidenciarse las fallas que tenía el equipo y, sobre todo, las que quiso mostrar Carlo Ancelotti a nivel táctico.

RODRYGO NO ES LA CAUSA, ES EL SÍNTOMA

En teoría, el Real Madrid es el club más exigente del mundo, pero no lo ha sido desde el mes de agosto ni mucho menos. Hay jugadores como Vinicius o como Mbappé que han estado lejos de su mejor versión, pero aún así han marcado las diferencias en muchos partidos. Otros como Fede Valverde y Jude Bellingham han estado más o menos acertados, pero han mostrado que son capaces de partirse la cara por el equipo. Que estos futbolistas se entiendan unos con otros es tarea de un Carlo Ancelotti que ha estado más pendiente de Brasil que de sus últimos meses en Valdebebas. No pasa nada por decirlo, pero las cosas son así y todos las conocen.

He sido especialmente crítico con Rodrygo Goes, pero sigo sin entender el motivo por el que ha jugado tanto. Bueno, en realidad sí que lo intuyo, pero decirlo sería dejar muy mal al cuerpo técnico y a la directiva. En cualquier caso, es el claro síntoma de que se ha perdido la exigencia en el Real Madrid. ¿Cómo es posible que un jugador con números ridículos sea intocable en el once titular? Juzguen ustedes mismos, pero ha anotado 1 gol en los últimos 24 partidos disputados. Muchos hablan de su posición en el campo, pero es un argumento tan vacío como el pundonor del brasileño esta temporada.

La famosa exigencia del Real Madrid debe regresar con Xabi Alonso, Klopp o el que sea. Es imposible que un proyecto funcione si uno de tus jugadores no rinde bien y aún así es titular indiscutible.