Se va del Real Madrid en el momento más oportuno

Siempre ha sido uno de los mejores guerreros del Real Madrid, pero la temporada le ha pasado totalmente por encima. Hace pocas horas se ha confirmado el adiós definitivo de Lucas Vázquez tras una década en el primer equipo. Siempre han discutido su rendimiento y sus cualidades, pero lo cierto es que pocos han logrado ser tan importantes en determinados momentos. Para el recuerdo de todos nosotros quedan sus penaltis en Milán y en Mánchester en dos partidos de máxima tensión. Para él no significaba tanto, algo que demuestra claramente que tiene el ADN del Real Madrid en cada célula de su organismo.

NO HA SIDO SU CULPA

De la misma forma que con Carlo Ancelotti y con tantos otros, creo que hemos sido muy injustos con Lucas Vázquez. Siempre ha sido el suplente ideal de Dani Carvajal, algo que se pudo demostrar en la temporada de la Decimoquinta. Era titular de vez en cuando y rendía ante cualquier rival, o sino que se lo digan al FC Barcelona en el Santiago Bernabéu. Anotó un gol, provocó un penalti y dio la asistencia del 3-2 de Jude Bellingham en último suspiro. Su nivel era esplendoroso y lo cierto es que pese a las constantes mofas se merecía ir a la selección española.

Esta temporada le ha pasado por encima. Sin Dani Carvajal, con un vestuario realmente caótico y en una dinámica catastrófica. Poco pudo hacer más el bueno de Lucas Vázquez, aunque es cierto que su nivel ha sido realmente penoso. Las cosas como son.

Aún así, creo que todos los madridistas nos quedaremos con lo bueno y lo positivo de Lucas Vázquez. Su forma de ser, su madridismo y, sobre todo, su ambición, le han colocado entre los grandes mitos de la cantera del Real Madrid. Ojalá los que vengan tengan la mitad de éxitos que ha tenido el gallego en el primer equipo.

Gracias por todo, Cafucas.