Una oportunidad para Benítez
Rafa Benítez aterriza en Madrid con gran parte de la afición en contra y con una sensación de pesimismo. Sin embargo, el técnico tiene en su mano cambiar esa primera impresión. Quizá este tren llega en un mal momento, tras su fracaso con el Nápoles y con unas últimas experiencias nada satisfactorias, pero sin duda es el que llevaba esperando toda la vida.
Si la elección de Benítez ha sido una decisión positiva o negativa no sé sabrá hasta dentro de un año. Mientras, el madridismo debe dar una oportunidad a un entrenador que llega con ilusión y con la experiencia suficiente como para poder triunfar en el Real Madrid. El éxito o el fracaso lo marcará su trabajo. El puesto de técnico es el único en el que la meritocracia está instaurada por decreto, y si no que se lo pregunten a Ancelotti. Si gana seguirá y si no será despedido. Ley del fútbol.
Llama la atención que quizá demasiados madridistas niegan una oportunidad a Benítez. Mal asunto. Aunque solo sea por condición humana, el madrileño debe contar con un voto de confianza. Ya veremos si después lo desaprovecha o enamora por completo a una afición depechada tras una temporada sin títulos. Haters e interesados hay muchos, pero los mismos que eligieron a Mourinho o Ancelotti son los que han seleccionado a Benítez. Confianza y ojalá tampoco se equivoquen esta vez.
Es cierto que Rafa Benítez no era mi favorito para suceder Ancelotti. Pero una vez confirmada su contratación, es el entrenador del Real Madrid. De mi Madrid. De nuestro Madrid. Por tanto ahora merece apoyo y reconocimiento para que el próximo año por estas fechas estemos todos de fiesta en Cibeles. En mi mourinhismo intrínseco se enciende una luz de esperanza con Benítez. El madrileño es un entrenador duro, con personalidad, trabajador y poco amigo de las filtraciones. Si mantiene sus valores en el Real Madrid, conquistará a este difícil afición. Suerte, Rafa. Tús éxitos serán los de todos los madridistas. Ahora estamos en el mismo barco.