FINAL | Real Madrid 82-93 Unicaja: la falta de ideas y de acierto en el triple condenan a los blancos

¡Final en Badalona! El Real Madrid perdió un encuentro dominado de principio a fin por el Unicaja en estas semifinales de Copa del Rey. Los blancos no jugaron bien en ninguna fase del partido, y con un bajísimo acierto en triple no hubo contienda que disputar. Chus Mateo no tuvo ideas para cambiar el sistema propuesto en ningún momento, y eso se notó. El juego al poste fue muy pobre e insuficiente, sumado a la falta de capturas en las segundas jugadas, los malagueños reventaron el marcador. Por otro lado, la actitud tampoco fue la mejor. A pensar en las competiciones que restan.

El primer cuarto empezó de forma muy dinámica para ambos conjuntos, pero fue Perry quien adelantó a los suyos con un buen triple. El Unicaja, que eliminó al Barcelona en los cuartos de final, era un rival complicado, y así lo hizo notar. Los malagueños mezclaron el juego zonal con un uso exterior muy eficiente, y ya se pusieron tres arriba en este comienzo. Las jugadas propuestas por Chus Mateo se ejecutaron de forma muy pobre, con tiros muy forzados e ineficientes. El final de periodo no cambió en demasía, ya que las jugadas rápidas y con pocas posesiones se repitieron, pero ningún equipo tuvo un gran acierto en los tiros de campo. Edy Tavares era el punto central de los blancos, aunque la defensa de la zona propuesta por Ibón Navarro fue muy buena, impidiendo al caboverdiano brillar como en otras ocasiones.

El segundo asalto no cambió la dinámica vista anteriormente, y es que la dureza defensiva de los malagueños dificultó en gran medida las ofensivas blancas, que no lograban buscar un camino al aro más sencillo. Por otro lado, Darío Brizuela no estuvo acertado por su parte, y esto ayudó a que el marcador se mantuviera tan bajo. En clave Real Madrid, los triples no entraban, y la defensa exterior tampoco fue la mejor, lo que propició que los visitantes se adelantaran con un tiro exterior de Kendrick Perry, que ya era el más destacado de los suyos. Dzanan Musa alcanzó los diez puntos, y Gabriel Deck le acompañó muy de cerca con seis unidades, pero el verdadero problema se encontraba atrás, ya que en global no fueron capaces de leer los sistemas rivales. Empate al descanso con mucho por mejorar por parte madridista, que no encontró su forma y tampoco los tiros.

Tras el paso por vestuarios, la falta de ideas se hizo palpable en los blancos, que sufrieron en defensa frente a Will Thomas, que se comió a Guerschon Yabusele en cada posteo. Dylan Osetkowski fue un problema para los locales, tanto en la zona como en el exterior, muy acertado en esta faceta. Chus Mateo no movía el banquillo y sus soluciones eran paupérrimas ante un dominio absoluto del Unicaja, que jugó de forma excelente, sobre todo en defensa. Canasta en propia de Petr Cornelie, los malagueños sabían hacer daño a los blancos, sin capacidad de reacción en las dos partes de la cancha. Por su parte, Deck era el único, junto a Musa, que dio su mejor cara para intentar reducir la ventaja malagueña, pero estaban solos. El final de cuarto fue un auténtico desastre, con numerosas pérdidas y faltas personales completamente innecesarias, que solo ampliaron la renta conseguida por el conjunto de Ibón Navarro.

Los últimos diez minutos fueron similares a otros comienzos, y es que a Chus Mateo se le veía sin ideas para cambiar el curso del encuentro, solo un juego al poste del Paleolítico que ya se ha visto durante la temporada que no es eficiente. Mientras tanto, los blancos solo anotaban desde el tiro libre, sin respuesta para los carretones malagueños, acertados y eficientes. Los emparejamientos desfavorables eran lo único que aprovechaban los blancos, pero en el resto de facultades baloncestísticas eran insuficientes. Superados por completo por el escenario y nivel del rival, el Real Madrid se encontró en la peor situación, con un -12 y sin ideas para cambiarlo. Adam Hanga erró varios tiros libres que pudieron haber acercado a los madridistas, pero las sensaciones eran muy malas. Con un triple de Tyson Carter mataron el encuentro, que ya no tuvo vuelta atrás para los blancos desde el segundo cuarto, cuando los malagueños se sintieron superiores y lo demostraron.

El próximo partido del Real Madrid de baloncesto será el jueves frente al Zalgiris de Euroliga en el WiZink Center, a las 20:45 horas.