NOTAS: Rayo B - Castilla

Cuarta derrota consecutiva de un Castilla que no logró dominar a un Rayo que se adaptó mejor al césped artificial. El más destacado fue Llorente que, ya no solo es un seguro atrás, sino que se atreve al ataque. El central madridista puso el 1-1 en el marcador tras un remate de delantero puro. Burgui estuvo más desaparecido que nunca.

 

YÁÑEZ: 5. El catalán recibió dos goles en el día de hoy, aunque poco pudo hacer para evitarlos. En ambos tantos, los zagueros perdieron la marca y los jugadores franjirrojos remataron a placer. Sin embargo, mostró seguridad por bajo en el resto de intervenciones.

VARELA: 6’5. Con Varela sobre el césped, el Castilla se siente seguro. El uruguayo corta, roba e incluso se atreve con las jugadas de ataque. Sin embargo, hoy no pudo evitar una nueva derrota para los suyos.

JOSÉ LEÓN: 5’5. El central volvía al once inicial debido a la baja de Derik, pero hoy no estuvo afortunado. El zaguero del Real Madrid falló en el primer gol, dejando fuera de marca a Toni. El resto del partido estuvo bien al corte, para evitar que la herida fuera mayor.

LLORENTE: 6’5. Se acaban los calificativos para un Diego Llorente que se ha convertido en un imprescindible para Zidane. El madrileño es un completo cerrojo para el conjunto castillista. Hoy, además, se atrevió en ataque y tuvo fortuna. En el minuto 9' se disfrazó de delantero y marcó un auténtico golazo a la salida de un córner para poner las tablas en el marcador.

NOBLEJAS: 6’5. A punto estuvo de liarla en el minuto 2', con una cesion a Yáñez que pudo suponer el primer tanto para el Rayo B. El madrileño se atrevió con las jugadas de ataque. De hecho, mandó un balón al palo en el 14'. Sin embargo, perdió la marca sobre Clavería, lo que supuso el gol definitivo para la victoria rayista. A pesar de ello estuvo magnifico en la presión y la anticipación.

AGUZA: 5’5. Fue nuevamente el capitán del conjunto castillista. No brilló, como tampoco lo hicieron el resto de sus compañeros, pero su veteranía aporta seguridad sobre el campo. El centrocampista lo intentó en varias ocasiones, pero no tuvo fortuna de cara a gol.

JAVI MUÑOZ: 5’5. El centrocampista volvía a un once inicial, en el que pasó prácticamente desapercibido. El mediocentro del Real Madrid C se dejó llevar por el bajón del equipo y no logró mostrar esa calidad a la que nos tiene acostumbrado.

TORRÓ: 5’5. Partido correcto de Torró, a pesar de la derrota. El alicantino se ha convertido en otro de los imprescindibles de Zidane en el centro del campo. En la recta final del encuentro vio la amarilla por una entrada pegada a la banda derecha.

ODEGAARD: 5. El noruego estuvo algo desaparecido durante el tiempo que estuvo sobre el terreno de juego y no participo mucho en el juego de su equipo. Finalmente, fue sustituido por Álvaro Jiménez en el 66.

BURGUI: 6. Sorprendente el partido del extremeño, que estuvo más desaparecido de lo habitual. El extremo zurdo desborda, regatea, y se ha convertido en un auténtico quebradero para las defensas rivales. Sin embargo, hoy apenas logró entrar en juego. Los balones no le llegaban, y cuando le llegaban tenía a dos jugadores encima.

DE TOMÁS: 6. Fue de menos a más a lo largo de todo el encuentro. Apenas entró en juego durante la primera mitad. Sin embargo, se mostró mucho más participativo durante los segundos 45 minutos. Tuvo varias oportunidades para dar los tres puntos a los suyos -de hecho, le anularon un gol por fuera de juego- pero hoy no logró ser decisivo.

ÁLVARO JIMÉNEZ: 6. Entró en el minuto 66 en lugar de Odegaard e imprimió una velocidad más al juego del conjunto castillista. Se mostró muy incisivo por la banda derecha, pero no estuvo acertado de cara a portería.

MARIANO: 6. Fue el cambio más ofensivo de Zidane. Entró en el minuto 83 en sustitución de Noblejas, pero poco pudo hacer para evitar la derrota de los suyos. Tras su buena primera parte el pasado fin de semana hoy apenas tuvo tiempo para entrar en juego.

ZIDANE: 6’5. Dejó fuera del once inicial a Marcos Llorente y Benavente, en detrimento de Torró y Javi Muñoz. En la segunda mitad, y con el empate en el marcador, el francés quiso ir a por el partido y sacó todo el arsenal ofensivo. En el 66, sustituyó a un Odegaard que había estado algo desaparecido por Álvaro Jiménez, a fin de buscar profundidad por la banda derecha. Ya en el 83, y con el 2-1, dio entrada a Mariano por Noblejas. Un cambio ultraofensivo que no sirvió al galo para llevarse los tres puntos.