Piqué y España, lo de siempre: ¿es realmente necesario para todos?

Bernabeudigital.com

Como en toda concentración de la Selección Española, Gerard Piqué se ha vuelto a convertir en el director de orquesta. No porque su juego reine dentro de la nueva propuesta de Julen Lopetegui, ni tampoco porque él pretenda tal protagonismo una vez se viste con la indumentaria rojigualda, sino, más bien, porque en cada balón que toca, cada movimiento que genera, le acompaña una ensordecedora masa de pitos a sus espaldas. Pero, ¿por qué se pita al central catalán?

No hay fin de semana desde el sofá, o desde la zona mixta, que se le resista a Gerard Piqué durante el calendario regular. El defensor del FC Barcelona, todos le conocemos, es un amante de estar siempre en el punto de mira, al acecho, como deseoso de que el Real Madrid peque en cualquier injusticia, o acto punible bajo su parecer, para saltar como portavoz del conjunto barcelonés. O mejor aún, cual pastor o profeta de los aficionados al club condal.

Sin embargo, la lección la realizó hace unos pocos días Dani Carvajal. El lateral del Real Madrid, el mismo que se quiso acordar del propio Piqué en Cibeles, y quién sabe cuántas más de puertas para adentro, como también sucederá a la inversa (no cabe duda), rompió una lanza a favor de su compañero deSelección, al declarar que cuando pitan a uno con España lo hacen con todos. Pues bien, esta noche (20:45), España se juega buena parte de sus aspiraciones de estar en el próximo Mundial de Rusia.

Jugará en Skopje, en Macedonia, a miles de kilómetros de nuestras fronteras, donde, si algún aficionado desperdigado por la zona lo permite, España volverá a jugar como una sola. Como ha hecho siempre, con y sin Piqué. Pues si ya parece absurdo que unos piten a su propio himno, no mucho menos resulta que los otros hagan lo mismo con un jugador de su misma Selección. Tres Eurocopas y un Mundial consagran a La Roja. Ahora ya sí nos conocen fuera.