"Florentino Pérez se acercaba y me ponía la servilleta ahí"

Es de sobra sabido que Florentino Pérez siempre ha trabajado en traer al Real Madrid a los mejores jugadores del mundo. Incluso a sabiendas de que algunos de ellos pudieran estar en equipos rivales. De hecho, así es como llegó a la presidencia el pasado siglo, con el polémico fichaje de Luis Figo desde el Fútbol Club Barcelona. Después llegaron otros, aunque no tan exitosos, como el de Théo Hernández, desde el Atlético de Madrid, o de Thibaut Courtois. Pero no siempre se pudo salir con la suya el máximo mandatario merengue. 

FALCAO PUDO JUGAR EN EL REAL MADRID

Uno de los grandes goleadores de la liga en las últimas décadas, Radamel Falcao, recuerda cómo el presidente del Real Madrid le quería sacar del Atlético para cambiarle de bando: "Florentino se acercaba y me ponía la servilleta ahí. Y yo no, por favor, esconde esa servilleta", recuerda en una charla con su excompañero colchonero, Mario Suárez. 

El ariete colombiano aterrizó en LaLiga procedente del Oporto, donde demostró su capacidad goleadora, esa que trasladó a su llegada a España. Tal fue su nivel que incluso el Real Madrid buscó su fichaje. También sonó para el Fútbol Club Barcelona, pero acabó marchándose al Manchester United. Posteriormente jugó para el Mónaco, donde coincidió con un Kylian Mbappé que, en un inicio, le generó esta sensación: "Este chico es buenísimo, pero no se la pasa a nadie". A la postre resultó un crack que dejaría en las arcas del club monegasco 175 millones de euros tras su salida al Paris Saint-Germain.