ANÁLISIS BD - No es oro todo lo que reluce

La suerte ha decidido reunir a Mbappé, Neymar y el Real Madrid en los octavos de final de la Champions League. El PSG de Unai Emery, temible en toda Europa, será el rival del equipo de Zidane.

Por mucho que un club se gaste 222 millones de euros en Neymar y 180 millones de euros en Mbappé, puede ser un rival peligroso, como es el caso, pero no es el rival a batir. El equipo más temible es el vigente campeón. Ese rival es el Real Madrid.

Lo que está claro es que de los posibles rivales para el equipo de Zinedine Zidane en el sorteo, le ha tocado el más difícil. La tripleta atacante del equipo parisino y la calidad de muchos de los jugadores hace la eliminatoria más compleja.

El Real Madrid siempre se crece ante estas circunstancias. Es cierto que el equipo blanco no está en un buen momento, dejando de lado la goleada ante el Sevilla. Pero hasta febrero queda mucho.

Todo aficionado madridista puede ser positivo. Más miedo debe tener el PSG, equipo que todavía no ha demostrado nada ante un rival grande. De hecho el último recuerdo del equipo francés en las eliminatorias de la máxima competición europea fue la remontada del FC Barcelona por 6-1. El equipo a batir es el de la capital de España, que se ha hecho con tres de las últimas cuatro ediciones de la Champions.

El PSG tampoco es que se encuentre en su mejor momento. Dos derrotas en los últimos tres partidos, ante un Bayern en horas bajas y ante el Estrasburgo, un equipo que se encuentra en la mitad de la tabla de la Ligue 1.

A eso se le puede sumar que el egocentrismo de Neymar en el vestuario, pese a que parece haber desaparecido, ha generado mal estar con algunos de sus compañeros. Sobre todo el primer problema que hubo con Cavani. Aunque eso, en principio, es cosa del pasado.

A dos meses de que ruede el balón no se pueden hacer cábalas exactas sobre como llegarán al enfrentamiento ambos equipos. Pero hay datos que pese a que no deciden eliminatorias nos dan una idea de lo que podría pasar.

El Madrid no pierde un partido en eliminatorias desde el 6 de abril de 2016, ante el Wolfsburgo, 2-0. Ese mismo año Madrid y PSG se vieron las caras en dos encuentros de la fase de grupos de la Champions. En el Parque de los Príncipes el encuentro no paso del empate a 0. Mientras que en el Bernabéu fue el equipo del, por entonces, entrenador madridista, Rafa Benítez, el que logró la victoria con un tanto de Nacho.

Unai Emery nunca ha ganado al Real Madrid en el Bernabéu, 10 derrotas y un empate. Aunque en Francia no aseguran que el entrenador guipuzcoano sea el que esté en el banquillo para el inicio de la eliminatoria.

La cosa está igualada pero seguramente que los que se han llevado las manos a la cabeza han sido los aficionados parisinos. Tienen sus motivos para confiar en el pase. Pero el Madrid es el Madrid y en Champions todo rival tiembla al escuchar el himno de la máxima competición continental de clubes en el Santiago Bernabéu.

Como no se puede mover las agujas del reloj para hacer que ruede el balón. Habrá que esperar dos meses para ver uno de los enfrentamientos del año, una final anticipada, donde el Real Madrid, por historia, nivel y experiencia parte como favorito.