Mbappé supera el trámite: la crónica del Talavera 2-3 Real Madrid

El Estadio Municipal del Prado iba a presenciar "una gran noche" de Copa del Rey. El Real Madrid se plantó en tierras manchegas con catorce jugadores del primer equipo y seis canteranos, con Xabi Alonso en la cuerda floja y con el objetivo de superar la visita al dentista que supone para los blancos la primera ronda de este torneo. El Talavera, por su parte, quería seguir con su andadura -ya histórica- eliminando a los madridistas ante su gente. 

Xabi Alonso sacó un once muy ofensivo con titulares y suplentes entreverados; Lunin volvía a la portería, escoltado por David Jiménez y Fran Garcia en los laterales y en el centro de la zaga por Huijsen y Carreras. En el centro del campo, Güler, Ceballos y Mastantuono para lanzar en ataque a Endrick, Gonzalo y Mbappé. 

MBAPPÉ FUE DEMASIADO

Los primeros compases del encuentro estuvieron marcados por el alto ritmo impuesto por las ganas de hacer historia del Talavera. Aunque fue el Real Madrid el que disfrutó de la primera gran ocasión del encuentro, pero Mbappé no pudo superar a un Jaime González que se hizo enorme ante el francés. El conjunto blanco -hoy de azul oscuro- tuvo el peso del juego desde el inicio pero no podia permitirse ni un respiro en cuánto a intensidad se refiere, porque los blanquiazules salían a la contra a la mínima oportunidad que tenían. Lunin confirmaba la peligrosidad del rival con una intervención de mérito a un testarazo de Isaiah tras un centro sin oposición desde el costado derecho. 

Pasado el ecuador de la primera mitad, Güler rozó el gol tras un gran lanzamiento de falta que iba dirigido a la escuadra, pero el guardameta del Talavera metió una mano milagrosa para evitar el tanto del turco. Di Renzo respondió para los suyos con un disparo lejano, pero desviado de la meta madridista. El Real Madrid siguió atacando sin profundidad, pero con empuje. Un empuje que embotelló a los locales en su propio campo y provocó el primer tanto del encuentro después de que un balón llovido golpeara en el brazo de Moreno dentro del área. Mbappé se encargó de engañar a González desde el punto de penalti (0-1, 42´) para abrir el marcador.

El Talavera se vino abajo y el Real Madrid se fue a buscar un segundo gol que encontraría gracias a una incursión en el área y un centro de Mbappé que Stiepovich, de forma involuntaria, introdujo en su propia portería (0-2, 46´) antes del descanso. 

SUFRIMIENTO Y PASE DE RONDA

El segundo capítulo del encuentro empezó igual que el primero. Mbappé tuvo un mano a mano, pero esta vez fue el francés el que cruzó el balón en exceso. Xabi Alonso movió el banquillo para meter a Rodrygo por un Mastantuono que desaprovechó la oportunidad que le dio el tolosarra. El Talavera, por su parte, bajó los brazos tras un buen inicio desde la vuelta de vestuarios aunque disfrutó de un par de acercamientos tímidos a la meta de Lunin. Jaime González siguió siendo el mejor de los suyos y dejó una gran parada a un buen lanzamiento de falta de Güler, como en la recta final del primer tiempo. 

El centro del campo del Real Madrid se desordenó; Ceballos cometió muchas pérdidas de balón y Güler no llegaba a la presión. Alonso dio entrada a Bellingham y a Tchouameni para evitar males mayores y para dotarle de más músculo a la medular. Lejos de hacerse más fuerte, el equipo se cayó aún más y el Talavera no desaprovechó la ocasión para acercarse en el marcador. Stiepovich le ganó la espalda a Fran García para que Nahuel, al primer toque y en el segundo palo, rematara a placer para acortar distancias (1-2, 80´)

Cestero debutó con el primer equipo en un contexto en el que seguro que el canterano no hubiera elegido. Sin embargo, Mbappé, con la colaboración de Jaime, puso el tanto de la aparente tranquilidad con un disparo lejano que el portero del Talavera no pudo atajar (1-3, 87´). Si, aparente tranquilidad porque el conjunto blanquiazul, lejos de rendirse, volvió a golpear con un tanto de rechace de Di Renzo (2-3, 91´). Lunin intervino para evitar el empate a tres en el último suspiro que precedió al final del partido.