Abierta la campaña contra Benítez

Cambian los entrenadores, cambian los jugadores, presidentes… pero si hay algo que no cambia en el Real Madrid son las campañas contra todo lo que no cuadre en la idiosincrasia de la mayor parte de la opinión pública. De aquellos que se creen por encima del bien y del mal y, sobre todo, por encima del club blanco. Que se piensan que tienen la verdad universal y es que no hay nada más español que saberse mejor que el resto.

Desde que llegó Rafa Benítez al Madrid, muy pocos son los que han roto una lanza en su favor. No venía con la vitola de ese entrenador respetado por todos, y eso que desde tiempos inmemoriales pedían que al equipo merengue le dirigiese un técnico de la casa, un español. Sin embargo, ni siquiera esto le ha valido a Benítez para tener un mínimo margen de error. Tachado de defensivo y amarrategui, son muchos los que esperaban como lobos un fallo para saltar sobre él.

A Capello le gustaba el catenaccio, Pellegrini no tenía voz de mando, Mourinho mandaba demasiado, Ancelotti tuvo demasiada mano izquierda…. Nunca llueve a gusto de todos, pero a todos se les concedió el beneficio de la duda, a todos menos a Benítez. Nueve partidos oficiales; dos victorias en Champions, segundo en Liga a tan solo un punto del líder, además siendo el equipo más goleador y menos goleado; pero nada, que no es suficiente. Si le marcan menos, que debería marcar más y cuando marca que no lo hace ante rivales de entidad. ¡Cómo que no se han perdido Ligas por perder puntos tontos ante equipos pequeños!

Ni todo lo que hace está bien, ni todo lo que hace está mal. Por supuesto que se equivocó en el planteamiento contra el Atleti, totalmente de acuerdo en que debería tirar más de jugadores como Lucas Vázquez o Cheryshev, o en que debería plantearse que Benzema no debe ser siempre el sustituido, y más si está en este estado de forma. Pero también hay que reconocerle que las líneas están más juntas, se presiona más al rival cuando no se tiene la pelota y ni que decir tiene que el bagaje de goles encajados roza la perfección.

Alejémonos de las campañas que solo tienen como fin hacer daño a la estabilidad del Real Madrid. Dejemos de repetir como papagayos las consignas que repiten una y otra vez ciertos medios. ¿Quién no ha escuchado alguna vez a un amigo repetir lo que se dice por televisión o se lee en los periódicos? Un poco de criterio propio, que para oír lo que dicen en las tertulias enciendo la televisión.