Achraf se ha doctorado y merece una oportunidad

Bernabeudigital.com

Poco queda de aquel tímido bisoño compungido ante la estridencia del vociferio del Bernabéu, al menos ataviado con una camiseta blanca. Achraf Hakimi partió hace dos cursos de Erasmus al Borussia Dortmund y sus notas no han podido ser mejores. El marroquí vuelve con máster y doctorado bajo el brazo luego de una travesía que le ha especializado en ambas bandas y hasta de extremo, donde a base de goles e hincar codos no ha desentonado en comparación con un homólogo al uso. 

El 30 de junio, o cuando se termine la temporada si es que se reanuda, tendrá que hacer las maletas de nuevo, esta vez para emprender el viaje de regreso con destino a Madrid. Su excelsa labor a orillas del Ruhr unido a que el Real solo cuenta con Carvajal como seguro en la posición natural del magrebí, son motivos más que suficientes que le hacen merecedor de un puesto en la tripulación blanca de la 20/21, aunque en los últimos días no se ha descartado una salida definitiva al propio Dortmund o al Bayern. Empero, su agente ha desmentido los contactos con el escuadrón bávaro. Odriozola, precisamente ahora a préstamo en las filas del hegemónico club teutón, ha demostrado que no tiene pechera, al menos a día de hoy, para enfundarse la blanca, y hasta ahora en Múnich solo le daban opción de cazar moscas. Ahora es la oportunidad de Achraf. Habrá que ver si al africano no le devora la presión como hace unas campañas, y es que la atmósfera de Chamartín, véase otros casos como Theo, Arbeloa o Miguel Torres, es una trituradora de laterales.