El Marqués, Casillas y Munir
La semana de selecciones es al fútbol lo que Piraña 3D al cine, un sinsentido. Prácticamente no ha comenzado la temporada y ya tenemos el primer parón para preparar una Eurocopa que se celebra dentro de dos años. Los primeros partidos han servido para comprobar cómo España sigue sin encontrar su camino. Aunque cambien los jugadores, el cambio radical no se ha llevado a término. Lo necesario era reemplazar al seleccionador y al estilo.
Nadie duda que el juego de toque le ha dado a España sus mejores años de gloria, pero seguir con lo mismo seis años después es de catetos. Tal y como ocurre a nivel de clubes, la mayoría de equipos ya sabe lo que tiene que hacer ante este tipo de situaciones, y los partidos de España son tan predecibles como una película de Van Damme. Toque, toque, toque y más toque, sin crear el más mínimo peligro. Nada nuevo en el horizonte.
A pesar de la derrota, el choque ante Francia si que tuvo un cambio importante. De Gea le quitó el puesto a Casillas, o mejor dicho, Del Bosque sentó a Casillas. Aunque muchos traten de adornarlo con palabrería, lo cierto es que el cambio generacional tiene que llegar también a la portería. Antes del encuentro, El Marqués aseguraba que Iker estaba en su mejor momento, pero no pasaron ni 48 horas cuando decidió darle el puesto de titular ante Francia a De Gea. Su razonamiento fue que un error ante los franceses podría haber sido algo horrible para él. Simplificando: Anímicamente no está bien pero juega por decreto.
Además de con Casillas, Del Bosque se ha metido en otro fregao importante. Diego Costa, que sigue sin encontrar su sitio en la selección, es baja para el partido ante Macedonia por problemas físicos. Su ausencia había abierto las puertas a jugadores como Negredo, Llorente e incluso Callejón, que está demostrando en el Nápoles que merece estar en La Roja antes que Cazorla, por poner un ejemplo. Sin embargo, el seleccionador hizo su particular delbosquiana y llamó a Munir, un jugador del Barcelona que ha disputado partido y medio al máximo nivel. La idea es privar a Marruecos de poder elegirle, tal y como sucedió a Bojan hace unos años. Un Bojan al que quizá le habría venido bien acudir a grandes citas con Serbia. Viendo el panorama, la única situación que tiene Callejón de acudir a la selección es la de nacionalizarse italiano. Lástima que ya no pueda.