La Yihad saca las garras

¿Recuerdan aquellos años en los cuales el Real Madrid era un equipo apreciado? ¿Aquellas estaciones en las que se destacaba el señorío del Real Madrid cuando los octavos de final y el FC Barcelona suponían una pesadilla? Pues eso se acabó, ¿por qué?, obvio. Ha vuelto el verdadero Real Madrid, el que alza la ‘orejona’ provocando la admiración por parte de los suyos y el odio en el corazón de los rivales.

La Yihad, la verdadera, hacía creer que la ojeriza hacia el mejor equipo del mundo había vuelto por la actitud de José Mourinho y es verdad. La actitud de Mourinho devolvió al Real Madrid a las puertas del Olimpo de las cuales había estado realmente alejado, hundido en el mundo de los mortales al cual el Madrid no pertenece. Con Mou los blancos volvieron a ese peldaño y con él se levantaron las primeras ampollas que parecían 'curadas' tras su marcha tres años más tarde. ¿Cuál ha sido la sorpresa? Que con Ancelotti y después de una temporada casi perfecta, esa inquina ha vuelto a renacer, en concreto hacia la actitud de un futbolista el cual era el centro de toda crítica antes de la llegada de Mou.

Cristiano Ronaldo ha sido literalmente apaleado por celebrar un gol en la final de la Champions, el cuarto tanto, que suponía su 17º gol en una Liga de Campeones y que finalmente supondría una escena para su próxima película. Pero es muy 'nuestra' esa lapidación sin saber el motivo, bueno el motivo es claro: Nuestros males vienen por haber sido tantas veces campeones.

Cristiano, que de su interior emana esa esencia que es puro Real Madrid, ha vuelto a abrir los ojos para darse cuenta de que cada acción que haga va a ser criticada solamente por el escudo que porta domingo tras domingo. Ahora bien, eso es lo bonito de ser del Real Madrid, que tu éxito suponga tal envidia en el resto de la humanidad que esa envidia se transforme en odio.

Eso significa ser del Real Madrid. Nosotros, que no aceptaríamos que se aplaudiera a nuestro entrenador tras haber perdido una final por 4-1. Nosotros, que tenemos que celebrar nuestras victorias con otros madridistas porque la otra parte del mundo nos delezna. Nosotros, al fin y al cabo el Real Madrid. Y como dice nuestro nuevo himno, Real Madrid y nada más.

autor

Alejandro López

De la cosecha del 91 emergió un apasionado periodista del deporte en general y de la portería y del aro en particular. Pasé por Onda Cero y Ocio Radio. El objetivismo no existe. Mi opinión, singular, directa y sin tapujos. "The Special Two".