Las dos caras de Bale
El parón de selecciones parece haber tenido un efecto positivo en la práctica totalidad de la plantilla blanca que se ha incorporado con sus respectivos combinados nacionales. Jugadores como Modric, Cristiano o Coentrao han dejado evidencias de una clara mejoría que podrá ser aprovechada por su club de cara al tramo decisivo de la temporada. Sin embargo, es Gareth Bale el gran beneficiado por este incómodo oasis en medio del calendario competitivo.
El galés se ha distanciado de las duras críticas que recibe constantemente en su contra por parte de ciertos sectores de la prensa española y eso ha supuesto el regreso de su mejor versión. Con su selección, Bale es el gran protagonista. El equipo de Chris Coleman ya se aproxima a una histórica clasificación para la Eurocopa 2016 y lo hace con Bale como su indiscutible estrella dentro y fuera del terreno de juego.
Desde que llegó al Real Madrid, el ‘11’ ha tenido que soportar voces que ponían en duda desde el precio pagado por él hasta su posición idónea en el terreno de juego, pasando por misteriosas lesiones que amenazaban incluso a su carrera deportiva. Dificultades con las que ha tenido convivir, a pesar de convertirse en pieza clave de victorias recientes que quedarán para la historia como el triunfo en la final de Copa del Rey y, sobre todo, la exhibición en Munich en la pasada Champions League.
Con este parón de selecciones se han destapado las dos caras que posee el futbolista de Cardiff. La versión cuestionada y eclipsada por la abundancia de estrellas a su alrededor que vivimos en el Real Madrid de la presente campaña o la de liderazgo y gran referente del equipo mostrada con Gales. Dos reflejos de un jugador llamado a hacer historia y convertirse también en el próximo líder con la camiseta blanca.