Mano dura o mano izquierda, esa es la cuestión

A vueltas con Carlo Ancelotti, el que se ganó el favor de todos como el ‘Pacificador’, ahora se encuentra inmerso en un huracán de críticas. Parece que ya no vale la buena sintonía con sus jugadores, que ya no es suficiente que él mismo haya sido futbolista y sepa lo que sienten sus pupilos, tampoco esa mano izquierda que tanto valoraban en su llegada es ahora lo que el Real Madrid necesita.

La tan reverenciada mano izquierda, solo al alcance de unos pocos decía, pues ahora esa mano izquierda se ha convertido en falta de carácter de Ancelotti para atar en corto a sus jugadores y tomar decisiones de vital importancia para los madridistas. Comienza el runrún, piden a un entrenador con mano dura ¿Un Capello?, ¿un Mourinho? De chiste como mínimo, lo que tanto se han hartado de criticar en prensa, radio, televisión y redes sociales, ahora parece la única solución para el actual campeón de Europa.

Dos estilos muy diferentes, dos formas de entender el fútbol, ambas igual de válidas, con sus detractores y sus seguidores. Esto no quiere decir que si te gusta Mourinho no puedas admitir que el método Ancelotti ha sido bueno en muchos momentos, al igual que los partidarios del italiano no pueden negar que Mourinho daba unas soluciones en el transcurso de los partidos que, en ocasiones, se echan de menos.

Lo que no se puede hacer es pedir siempre lo que no se tiene, los que tantas horas de televisión y tantas portadas dedicaron a echar por tierra el gran trabajo de Mourinho, no pueden pedir ahora al luso como el único salvador posible del Madrid. Para que, en una hipotética vuelta, esos mismos que tanto le han criticado repitan sus propios pecados. Más respeto al trabajo de los entrenadores, aunque no siempre estemos de acuerdo con ellos, pero si algo sacamos del mourinhismo es que hay que ir con el capitán del barco hasta el final o es que ya no se recuerda…