¿Y dónde metemos a Suárez?
Después del verano de Cristiano y del verano de Bale, parece ser que este año toca el de Luís Suárez. El uruguayo ha hecho un temporadón con el Liverpool y es normal que se le asocie con un equipo como el Real Madrid, en especial sabiendo que este interés del conjunto madridista por Luisito no es nuevo. La pasada temporada, el Madrid tanteó su incorporación tras la venta de Higuaín, y aunque su precio era mucho menor (por 50 millones llegaba a Chamartín), al final todos los esfuerzos fueron encaminados a Bale.
Unos esfuerzos que, por cierto, han demostrado ser acertados unos nueve meses después. A pesar de los constantes intentos de hacer ver el tremendo error de su fichaje, bien por su precio o bien por problemas médicos que vete tu a saber a qué especialistas se ha preguntado para diagnosticarlos, el galés se ha convertido en uno de los hombres de la temporada, marcando en las dos finales a las que ha llegado este año el Madrid. Hablando en plata, llegar y besar el santo.
Viendo los precedentes, parece claro que habría que abordar el fichaje de Luís Suárez. El uruguayo vendría para completar la mejor delantera del mundo y ser ese delantero tocahuevos que reclama parte del aficionado madridista, que ve en Karim un sinsangre que no merece seguir en el conjunto madridista. Sin embargo, el otro problema podría ser alterar para mal lo que ya se ha establecido en el equipo, porque si hay un jugador (o dos) que quiere a Benzema a su lado, ése es Cristiano (y Bale).
La asociacion que ha formado el francés con el portugués, y ahora con el galés, no se podría encontrar en otro jugador. Benzema es un tipo al que no le importa sacrificar un gol si con ello marca otro compañero. Un jugador al que no le importa ceder espacios y bajar a recibir para que otros puedan lucirse y acumular estadísticas. La llegada de Suárez provocaría la salida de Benzema, y de la BBC se pasaría a una CBS o algo por el estilo. Cristiano - Bale - Suárez sería un trío que seguro provocaría terror en los rivales, pero ¿cómo funcionaría el Madrid? ¿Estaría Suárez dispuesto a ceder protagonisto y goles (porque teniendo a Cristiano eso es casi seguro)? ¿Sería Cristiano el que empezaría a dejar a sus compañeros tirar faltas y penaltis para que estos no se enfadasen por no estar entre los máximos goleadores a final de temporada? ¿Cómo se tomaría Suárez una posible suplencia?
Demasiadas preguntas formula un fichaje que además de caro, podría provocar lo que ocurrió en la era de los galácticos. No al fichar por fichar y sí al hacerlo con cabeza. Con 97 goles marcados por la BBC, alterar ese ecosistema es de locos. Esos 70 millones (tirando por lo bajo), tendrían que servir para fichar un mediocentro (es lo que más falta hace) y con las sobras traerte un delantero tanque, de 1,90 como poco, que te permita jugar de otra forma cuando se te atasque un partido. Si al final se acaba fichando a Suárez y marca 50 goles, seré el primero en celebrarlo, pero desde aquí no bancamos su llegada.