Si se quiere gol, hay que pagar caro

La inflación que está viviendo el mundo del fútbol ha cogido un impulso prácticamente incontrolable. Hace apenas 14 años, el Real Madrid pagaba 94 millones de euros por Cristiano Ronaldo y todos nos llevábamos las manos a la cabeza por el precio del que era uno de los mejores jugadores del planeta. Ahora, por esa cifra no te llega para comprar a un jugador llamado Kolo Muani, delantero centro del Eintracht Frankfurt y suplente con la selección de Francia.

Los tiempos cambian y la entrada de los clubes-Estado en escena ha provocado que los precios de los futbolistas se disparen de sobremanera. Y eso, principalmente, afecta a las posiciones de ataque, puesto que el fin del fútbol es marcar gol en la otra portería y para eso están los delanteros.

TOCA RASCARSE EL BOLSILLO

Es bastante obvio que el Real Madrid va detrás de un ‘9’ para intentar reforzar una posición de ataque tras una temporada marcada por las lesiones y problemas físicos de Benzema y la falta de minutos de Álvaro Rodríguez. Con ello, hay muchas opciones que han ido saliendo a la palestra para la próxima temporada como son Dusan Vlahovic, Harry Kane, Kolo Muani, Osimhen, Hojlund…, pero todos ellos saldrían por encima de los 60 millones e, incluso, algunos llegarían a la friolera de los 100 millones de euros.

La política del Real Madrid es clara, solo quieren gastarse el dinero en estrellas mundiales como Haaland o Mbappé para reforzar el ataque. Pero no se puede depender únicamente de dos figuras de mercado cuyo futuro no depende del conjunto blanco ya que ambos tienen contrato con Manchester City y PSG. Por ello, y para evitar que la delantera esté comandada por un chaval de 18 años como Endrick o por un jugador que necesitar dosificarse como Benzema, el club blanco debe rascarse el bolsillo si quiere comprar gol.