Hiopos Lleida 81-88 Real Madrid | Reacción a tiempo en el último cuarto

Primeras posesiones del partido y gran inicio del Real Madrid, que anotó como quiso desde cualquier parte de la cancha para coger una pequeña ventaja, pero importante al fin y al cabo. Hiopos Lleida hizo lo propio con un Walden acertado en sus lanzamientos, aunque los madridistas pudieron contener este fulgurante comienzo de los locales. De hecho, fue una contienda muy reñida hasta el ecuador de este periodo, justo cuando los de Sergio Scariolo subieron un nivel en defensa, así como en efectividad. Así, los blancos se marcharon a la segunda parte de esta mitad con una ventaja casi de diez puntos.

Dentro del segundo cuarto, el Real Madrid no bajó la intensidad en ningún momento, conscientes de que esta semana había sido dura por la doble jornada de Euroliga, y quisieron cerrar la victoria cuanto antes. Asimismo, los dobles dígitos aparecieron en el marcador con color blanco, aunque fue la única buena noticia de cara al ecuador de periodo, ya que no duró mucho. Los visitantes subieron su nivel de intensidad en todos los sentidos, y Walden fue un auténtico dolor de cabeza en cada posesión. De hecho, el 10-0 de parcial fue inamovible, y los madridistas concedieron demasiado. Oriol Paulí fue quien devolvió la ventaja a los suyos, pero Mario Hezonja volvió a demostrar su calidad para sumar dos puntos más desde el tiro libre. Aun así, el descansó llegó en el mejor momento.

Tras el paso por vestuarios, el Real Madrid comenzó anotando, pero pronto fue el Hiopos Lleida quien tomó la iniciativa gracias al dominio de sus exteriores. Y se pusieron cinco puntos por delante, con el club blanco prácticamente noqueado y sin capacidad de reacción, ya que ni el ataque ni la defensa funcionaron de forma óptima. Se llegó al ecuador de este cuarto con una desventaja lo suficientemente amplia como para que los locales ralentizasen su juego. Por parte del conjunto dirigido por Scariolo, fue Hezonja quien lideró a los suyos, aunque no fue suficiente para cortar el parcial tan negativo que tenían en contra. Para los minutos finales, máxima igualdad, y quedaba todo por decidir.

Los primeros instantes del último cuarto fueron muy caóticos, casi como el resto de los periodos. El Real Madrid se logró poner por delante, pero Hiopos Lleida frenó una posible sangría gracias a buenas defensas consecutivas, y es que el encuentro se tornó en una contienda de ida y vuelta, donde la mejor toma de decisiones en los últimos metros se impuso. Aquí fue Sergio Llull quien dejó su sello con un triple clave para dejar congelado al conjunto local, y junto a otro de Hezonja, el final de encuentro fue mucho más tranquilo. De hecho, fue el croata quien selló la victoria para los madridistas gracias a acciones defensivas y de entradas al aro de mucho calibre.