FINAL | Real Madrid 98-65 Maccabi Playtika Tel Aviv: el regalo de los reyes de Europa

¡Final en el WiZink Center! Después de una semana algo movida en el entorno madridista tras la sangrante derrota liguera en el Clásico ante el Barça, el Real Madrid de baloncesto ha vuelto al Palacio para enfrentarse al Maccabi Tel Aviv en un partido clásico europeo por el que no pasan los años. Además, los de Chus Mateo han contado con una doble tarea, aprovechar la derrota de los líderes europeos y mejorar los numerosos errores sufridos ante el conjunto culé.

El inicio de partido ha sido de baloncesto antiguo, de mucho poso en ambos equipos y poca alegría. Dos equipos que llevan compitiendo temporada tras temporada. Los de Chus Mateo han sufrido un ligero aroma al partido del lunes frente al Barça, con dos malas defensas consecutivas de Williams-Goss, que ha solventado Tavares con dos tapones brillante. En ataque ha habido luces y claros, con jugadas fluidas y otras sin apenas ideas y un juego muy errático que ha llevado a una baja anotación. La poca dirección de Williams-Goss ha obligado a Chus Mateo a introducir a Sergio Rodríguez en el duelo con solo 5 minutos jugados, aunque el canario tampoco ha mejorado demasiado el viaje blanco en el cuarto y ha tenido que ser Yabusele el que haya aumentado la ventaja con acierto y físico. Pero, a pesar de la gran ventaja generada por los merengues en estos minutos, la mejoría del rebote defensivo no se ha notado, con varias segundas oportunidades para un Maccabi que, por suerte para los blancos, ha fallado más de lo que lo hizo el Barça.

El segundo cuarto ha cambiado el guion ha variado un poquito y para bien. El ‘Chacho’ ha decidido dar espectáculo y, por supuesto, generar juego para sus compañeros. Un triple por aquí, una asistencia brillante por allá y, con un toque de varita, una recuperación mágica cuando el balón se iba fuera de banda. Qué bueno sería para el Real Madrid recuperar el show lagunero. Acompañando a la rica salsa canaria –apodo que puso a Sergio Rodríguez el gran Andrés Montes– ha estado Petr Cornelie. Silencioso, trabajador, que no rehúye ni una ayuda y que, además, ha aportado 7 puntos en estos minutos. ¡Brillantez francesa al servicio blanco! Y si a ellos también les sumas a un exquisito Musa –11 puntos en este cuarto–, ante el que se rindió Chema de Lucas en una entrevista exclusiva en Bernabéu Digital, y a Abalde –5 puntos– más todo el trabajo defensivo, la diferencia es el +17 con el que los madridistas se han ido al descanso, aunque dos malos minutos finales han impedido a los de Chus Mateo marcharse con 7 puntos más de ventaja. 

Tras el paso por vestuarios,  Maccabi ha salido con más ímpetu y acierto frente a un Madrid pasivo que ha reaccionado a base de triples y en un abrir y cerrar de ojos se ha plantado con un 15-9 de parcial. Este equipo tiene muchos puntos, buenas defensas, mucho ritmo e ideas. En definitiva, hay mucho baloncesto. Solo hay que unirlo, engrasarlo y hacerlo despegar. Y en este cuarto, Causeur ha cogido los mandos y ha impulsado la nave blanca hacia la victoria si es que esta no estaba impulsada ya de la primera mitad. 

El último asalto, al que el Madrid ha entrado con la friolera de 29 puntos de ventaja y 5 tapones de Tavares, ha sido un baño de agua caliente con una posterior película con manta en el sofá. Un cuarto de lo más relajado, por fin, para los de Chus Mateo, que ha podido volver a dar minutos a Ndiaye. Una victoria tan trabajada como tranquila en su final para igualar en la clasificación a los 4 primeros clasificados, Olympiacos, Baskonia, Barça y Mónaco. Es, probablemente, la temporada más igualada de los últimos años. Con 17 partidos jugados, los 5 primeros se encuentran con 11 victorias y 6 derrotas. ¡Increíble! ¿Os imagináis esto en el fútbol? Se llamaría Superliga. 

El siguiente encuentro del Real Madrid de baloncesto se disputará el próximo domingo 8 de enero ante el Gran Canaria en Liga Endesa. Se jugará a las 12:30 horas.