Después de bajar los humos al Barça, a pensar en la ‘final’ de Alemania
Durante toda la semana la afición del Barcelona se frotaba las manos viendo cómo el Real Madrid caía frente al Cádiz y al Shakhtar. Muchos aficionados culés incluso presagiaban una ‘manita’, pero no es nada nuevo para los madridistas. Es la historia de todos los años. Los culés van de sobrados… hasta que llega el clásico. Y ahí los de Zidane es donde mejor se desenvuelven, callando bocas una y otra vez. No aprenden, pero es parte de su encanto.
Una vez que el Madrid ha dado una cura de humildad al Barcelona (1-3, pero el resultado pudo ser mayor), los blancos deben pensar desde ya en la finalísima del martes frente al Borussia Mönchengladbach. La expedición madridista partirá mañana hacia tierras germanas con el objetivo de traerse los 3 puntos bajo el brazo. El Real no puede fallar después de perder frente al Shakhtar, y es que una derrota en el Borussia Park supondría tener pie y medio fuera de los octavos de final. ¿Un empate? No sería un drama, pero los blancos aspiran a ganar para afrontar con mayor tranquilidad el doble enfrentamiento contra el Inter de Milán. Para ello, será necesaria la misma actitud que la mostrada en el Camp Nou.