La mejor noticia que tuvo el Real Madrid en la victoria frente al Celta

Bernabeudigital.com

El Real Madrid, en su faceta más irregular con la que a veces está transitando por la presente liga, despejó de un plumazo las dudas suscitadas tras el frenazo en Elche comenzando el nuevo año con el pie derecho. Con el campeonato cuesta arriba, todo lo que vuelva a ser no sumar de a tres convertirá la defensa del título doméstico en una quimera, pero a los de Zinedine Zidane no les tembló el pulso contra la tropa del cirujano Coudet. Los gallegos, en esplendor desde que se hospedó el nuevo inquilino en el banquillo, llegaban al Alfredo Di Stéfano tras acumular siete partidos sin perder. 

Sin el faro Sergio Ramos, una actuación coral plausible bajó de la nube a los celestes. Nacho, el gladiador de relevo, volvió a demostrar que está a tono cuando la necesidad apremia y le llama a filas, y arriba la victoria se cimentó en puro español. Lucas, con futuro incierto y enrevesado, firmó un gol y una asistencia, lo mismo que Marco Asensio, que empieza a renacer. Por la particularidad de su situación, el mallorquín fue la mayor alegría para el escuadrón merengue. Poco a poco está alzando la voz en los planes del entrenador y suma tres partidos consecutivos en los que ha dejado detalles esperanzadores. Contra el Granada dio una asistencia y dejó para la hemeroteca un remate de espuela al palo que de haber entrado, habría sido a buen seguro, con el campeonato a la mitad, una de las mejores dianas del curso a la postre; ante el Elche volvió a dejar su sello con uno de sus disparos de antaño que se estrelló en el larguero y en el estreno del nuevo año ante los célticos culminó una noche que puede suponer un antes y un después. 

Hace año y medio de aquella fatídica lesión ante el Arsenal en verano de 2019. Cada vez más integrado, el '24' se está despojando de aquel futbolista timorato en cada acción con su kilométrico revés en la retina. Ahora falta lo más difícil, lo que separa a los históricos de los que transitan sin pena ni gloria por el alambre: la regularidad.