Quien acierte en el nuevo mercado dominará la próxima década

11.01.2020 17:15 de  Diego Fuentes  Twitter:    ver lecturas
Quien acierte en el nuevo mercado dominará la próxima década
Bernabeudigital.com
© foto de Antonello Sammarco/Image Sport

En una era de fichajes fastuosos como los de Neymar, Mbappé, Joao Félix, Pogba o Hazard, la nueva década parece decidida a rezagar movimientos elitistas en una carrera en los despachos en la que irrumpe con fuerza la estrategia de anticiparse al talento joven. Una política empleada por el Real Madrid desde tiempo atrás que concede a los equipos de scouting y ojeadores un protagonismo cada vez mayor. Lejos quedan los clubes que puedan sobrevivir con un rudimentario puñado de jugadores, un entrenador y un presidente, y es que a día de hoy la entidad balompédica es un entramado que va mucho más allá de los sabores futbolísticos con que nos deleitamos cada fin de semana. Un organigrama complejo y con multitud de figuras que velan por un futuro tan alentador o más como esperan que sea el presente, y es que ante la voracidad de un mercado inflacionista que al más mínimo aplauso a un futbolista ya le etiqueta con tres cifras, hay que buscar nuevos derroteros.

Ello ha provocado que muchos equipos den la espalda por obligación o deseo a alimentar tal vorágine, por lo que las agendas cada vez más acogen manuscritos en forma de nombres exóticos que alimenten el mañana, como pueden ser los Reinier, Camavinga, Oshimen o multitud de perlas que en un mundo globalizado derriban la puerta en cada rincón del planeta. Apostar por ellos es una inversión de riesgo, que si bien en algunos casos no exige romper la banca, puede que el condicionamiento de múltiples factores contradiga al diagnóstico y en el futuro el diamante no sea más que otra piedra en el camino. Por muchos estudios que avalen la calidad, siempre existe un margen de error que proceda de la adaptación, exigencia u otros condicionantes. Sin embargo, para ello se derivan cargos en las entidades que eviten tal fin, y en un mundo interconectado y de escasas oportunidades como es el futbolístico, está claro que quien marque la hegemonía en los próximos años será quien cuente con el mejor equipo no ya de protagonistas sobre el campo, sino de personal en los despachos que visualicen el talento en cualquier lugar del mundo.