Un Mundialito para encarar con fuerza una labor todavía complicada

Bernabeudigital.com

El Real Madrid consiguió ayer en Abu Dabi su tercer Mundial de Clubes de forma consecutiva, el cuarto en cinco años. Un trofeo de gran prestigio, puesto que te convierte en el mejor equipo del planeta, pero que no acarrea gran dificultad; lo difícil es llegar a ese trofeo (ganar la Champions League). Los rivales son bastante inferiores y el campeón de Europa parte con mucha ventaja. De hecho, en las últimas 14 ediciones (las únicas con el formato Mundialito), el campeón de Europa se ha llevado el título en 11 ocasiones. Siempre ha estado repartido entre el campeón europeo y el sudamericano. Este año, River Plate llegaba como ganador de la Libertadores, pero el Al-Ain le eliminó; lo que facilitó más el camino del conjunto blanco.

Ahora bien, tampoco hay que quitar mérito al equipo. ¡Campeones del mundo! Ahí es nada. Un título brillante que viene muy bien para coger confianza de cara al segundo tramo de la temporada, el más importante. Esperemos que así sea. Que este Mundial de Clubes sirva para unir más al vestuario, dejar de lado la parsimonia de algunos partidos y encarar con la fuerza que requiere esta parte del curso donde se empiezan a jugar de verdad los títulos, y si el Madrid quiere volver a ganar el Mundialito al año que viene, ahora es el momento de recapacitar y dar el do de pecho en las demás competiciones donde hasta la fecha no ha estado del todo fino y siembra muchas dudas.