CRÓNICA - Vinicius salva un punto antes del derbi
El buen partido de Isco en Bérgamo le dio a Zidane una idea para la alineación contra la Real Sociedad. El malagueño pasaba al ataque, junto con Mariano y con Asensio. El perjudicado era Vinicius, que no estaba siendo para nada un jugador determinante –después lo iba a ser–, al menos lo que se le exige para poder jugar en el cuadro blanco. El resto del equipo mostrado por el Real Madrid hoy no dejaba más sorpresas. La empresa que tenía enfrente el equipo de Zidane no era nada sencilla: la Real de Imanol, el equipo que no pierde desde el 9 de enero.
Lo que ocurrió sobre el terreno no sorprendió. Una Real que cuando tenía el balón y atacaba siempre daba sensaciones de peligro; luego el Madrid, siempre atento en defensa y con los mismos problemas de siempre de cara a gol. Ambos equipos atacaban pero sin tener ocasiones claras. Pudo acabar en gol un cabezazo de Mariano tras un centro de Lucas Vázquez desde la derecha, pero el balón acabó despejado en la cabeza de Gorosabel y después en el palo. A posteriori, el rechazo del balón fue para Asensio, que lo hizo todo bien, aunque ahí estaba un defensor de la Real para despejar el disparo del balear, que iba a gol.
Lo cierto es que el juego de los blancos fue bueno en el primer tiempo. El centro del campo mandaba, con un Luka Modric descomunal. Llegaron también los disparos desde fuera del área para probar a Remiro, pero el meta vasco los despejó todo. Prácticamente, el Madrid intentaba todo lo que se le ocurría o estaba en su mano para romper la portería de los visitantes, pero sin la fortuna, porque no hay gol.
El Madrid perdió efectividad en el medio tras el descanso. La Real tomó el control del campo y del balón, por lo que los locales dejaron de atacar. Había descontrol y desconcierto, nada bueno en un momento crucial donde se tiene que remontar para no perder el hilo de la Liga. Es cierto que duró lo que hizo la gasolina a la Real –le dio para marcar el gol–. Entonces y cuando uno menos lo espera llegó el experimento que suele hacer Zidane a veces. Unas noches sale, otras no y hoy era la que tenía que salir mal. Se pasó de un 4-3-3 a un 3-5-2 y llegó la debacle.
A los diez minutos de haberse reanudado el encuentro llegó el gol. Casemiro no cogió la marca de Isak y Nacho tuvo que irse con el delantero sueco. Esto dejó a Mendy solo con la marca de Portu. El delantero español, de cabeza, logró superar a Courtois y hacer el primer tanto de la noche. Una decepción, después de lo que había sido la primera mitad para los blancos. Los tres de arriba se marcharon castigados por no haber sido capaces de generar ni de marcar y entraron sustituciones con Hugo Duro y Vinicius en punta.
Valverde entró y le dio más profundidad todavía al juego. Casemiro se fue arriba a rematar todo. Lucas también tuvo una ocasión de gol de cabeza que no entró por los pelos. El Madrid presionaba más y más y la Real, que daba por bueno el único gol, se encerró atrás. El partido se le iba a hacer largo y al final de tanto insistir, el Madrid encontró la fortuna. Lucas centró y Vinicius remató, que de rebote logró empatar a unos minutos del final.
Después, la Real defendió el empate, que lo daba por bueno viendo lo que el Madrid intentaba, y los blancos estaban a la desesperada. Hugo Duro pudo desempatar, pero su cabezazo fue taponado por un defensa. Finalmente hubo reparto de puntos entre ambos equipos. Al Madrid le sirve poco de cara al derbi, donde se juega prácticamente la Liga contra el Atlético de Madrid.