Mijatovic: "Se nos ha ido un amigo, no un presidente"
Pedja Mijatovic fue sin duda uno de los pilares clave en la etapa de Lorenzo Sanz como presidente del Real Madrid. El montenegrino fue el autor del gol de la Séptima pero el que puso los cimientos a ese equipo no fue otro que el presidente blanco. Precisamente de la relación entre ambos ha hablado el exjugador madridista en una entrevista concedida al diario AS, en la cual admite que se enteró muy pronto de su fallecimiento: "Al instante porque llevaba días colgado al teléfono hablando con su hijo Fernando. Por desgracia sabíamos que este desenlace era inevitable por culpa de esta maldita enfermedad. Estoy muy triste".
Su relación fue a más: "Es que curiosamente mi relación con él ha ido incluso a más desde que dejó la presidencia. Comíamos de vez en cuando y es verdad que tenía algunos problemas de salud, pero no como para dejarnos. Todo ha sido culpa del coronavirus. En esas veces que nos veíamos hemos hablado mucho de fútbol, porque él era muy entendido y le encantaba hablar de la que era su gran pasión aparte de su familia. Me preguntaba por jugadores nuevos que iban apareciendo, comentábamos cómo iba nuestro Madrid y, de hecho, hemos quedado varias veces a comer en estos últimos tiempos".
Comida con los héroes de la Séptima: "Estaba entusiasmado con la posibilidad de organizar una comida en Madrid reuniendo a todos los jugadores que estuvimos en aquella plantilla de la Séptima. No sólo a los que fichó, como era mi caso o el de Suker, Seedorf o Roberto Carlos. Quería reunir a todos los que protagonizamos aquella conquista. También a los médicos, la gente de comunicación… Todos. Quería reunir en un restaurante el espíritu de la Séptima pero con todos los que vivimos aquello en esa noche mágica de Ámsterdam. Yo le animaba porque me parecía una gran idea. No olvide que Lorenzo ha sido el padre de aquella generación que ha pasado a la historia del Madrid. Se puede decir que Lorenzo es el padre de la Séptima.
Así se fraguó su fichaje: "En la primavera de 1996 él envió a mi casa de Valencia a uno de sus vicepresidentes, Ignacio Silva. Me convenció en cinco minutos porque yo lo que quería desde que llegué a España es poder jugar en el club más laureado del mundo. Ignacio me pasó el teléfono. Era Lorenzo. Él me dijo: "Pedja, bienvenido al Real Madrid. Sé que contigo vamos a ganar títulos importantes.".
Carácter conciliador: "Cuando teníamos que negociar las primas reunía a los capitanes y a los dos o tres jugadores con más peso en el equipo y siempre llegábamos a un acuerdo sin malos rollos y con sintonía. Se ponía en la piel de jugador. Iba muy a menudo a los entrenamientos de la vieja Ciudad Deportiva y si te veía bajo de moral se te acercaba, le contabas tu problema y te daba consejos como un padre o un amigo, no como un presidente".
Empezó los grandes fichajes: "Él tenía una secretaría técnica y gente en el club que sabe de esto, pero su intuición con los grandes jugadores le llevó a las dos Champions. Él estaba convencido de que Davor (por Suker), Seedorf, Roberto Carlos y yo podríamos darle al Madrid el salto para volver a reinar en Europa. Y en invierno trajo a Panucci y después a Karembeu. Sabía de fútbol y olía el que podía ser jugador para el Madrid al más alto nivel. Cuando Lorenzo algo quería, lo conseguía. Y eso que al Madrid no le iba en esa época bien económicamente. Pero sabía que en realidad era una inversión. Los títulos rentabilizan todo. Sin duda, Lorenzo ha sido uno de los grandes presidentes de la historia del club aunque sólo estuviera cinco años".