Cristiano es humano
La noticia saltó en Córdoba, Cristiano es humano. El portugués se confundió y dio una patada a un rival sin balón de por medio. Reprochable la actitud del '7', ya que dejó al Real Madrid con un jugador menos en un momento decisivo del partido y con 1-1 en el marcador. Después abandonaría el campo sacando brillo al escudo de campeón del mundo. Un gesto que hubiera sido grandioso para celebrar un gol, pero no cuando acabas de ser expulsado.
Cristiano Ronaldo exhibió su lado más terrenal en el Nuevo Arcángel. Fruto de la impotencia estalló de una forma inadecuada para un jugador de su talla. Todos nos confundimos alguna vez, pero solo algunos son capaces de pedir perdón. Pocos minutos después del encuentro, el portugués mostró su arrepentimiento a través de Twitter. Un gesto que le honra como persona, a pesar de que un líder debe saber reaccionar en ese tipo de circunstancias. Al fin y al cabo, Cristiano es de carne y hueso. También tiene derecho a confundirse.
Los pelotones de fusilamiento encañonan a un Cristiano al que tenían especial ganas desde que levantara su tercer Balón de Oro. Tranquilidad, sigue siendo el mejor jugador del mundo. Todos esos que ahora lanzan su bilis contra el luso callaron cuando Messi mereció ser expulsado contra el Atleti -tanto en Liga como en Copa-. El doble rasero de toda la vida. Cristiano se confundió, fue expulsado y admitió su error. Ya está, no es necesario montar la Tercera Guerra Mundial.
Ahora falta por ver la sanción que impondrá el Comité de Competición. Con el derbi del Calderón a la vuelta de la esquina apuesten a que el crack luso no estará sobre el césped. Por supuesto, distinto sería si la camiseta que luciera fuera azulgrana. Y no son confabulaciones, son realidades. Lo mismo la RFEF sigue el método Tebas y decide dar ejemplo con el Real Madrid. Agárrense que vienen curvas.