Decídete James; Colombia o el Madrid

Antes de empezar a tratar el Caso James, quiero dejar clara una cosa: Me gusta James. Me parece que es uno de los jugadores con más calidad de la plantilla y que si quiere, puede ser decisivo en el Real Madrid. Futbolísticamente le considero por encima de jugadores como Isco o Asensio, pero en el Madrid, el fútbol no es suficiente. Parecía que era algo que había quedado demostrado tanto en su segunda temporada como en el inicio de esta campaña, pero aún no ha quedado claro.

El pasado domingo, James tenía una gran oportunidad de ganarse minutos y puestos en la rotación debido a la lesión de Modric. El colombiano iba a partir de inicio ante el Éibar, pero sintió molestias en el calentamiento y dejó su sitio a Kovacic. El centrocampista vio desde el banquillo el empate del club blanco y ni siquiera calentó en la segunda mitad. La sorpresa saltó al día siguiente cuando Colombia le convocó a pesar de sus problemas físicos. Esta decisión ha provocado un gran malestar en el club blanco, que no entienden el porqué de su llamada si no está en condiciones físicas de jugar ni con el Madrid ni con Colombia.

La selección cafetera está tratando por todos los medios contar con el jugador, al que no dudarán en forzar de cara a los compromisos internacionales de esta semana. Ahí es donde James tiene que dar un paso al frente. Necesita dejar las cosas claras, decir a los médicos de Colombia que no está al cien por cien y que lo más probable es que se rompa si fuerza esta semana. Lleva un año y medio diciendo que su sueño es triunfar en el Madrid. Pues bien, querido James, ese sueño empieza por anteponer tu estado físico y los deseos del Madrid a las exigencias de Colombia. 

autor

David Marcos

Conmigo quién quiera, contra mí quién pueda". Un día me hice seguidor del Real Madrid y desde entonces he disfrutado de pasillos, carreras eternas hasta el banquillo para celebrar un gol o voleas gloriosas. Sin embargo, siempre queda en el tintero todo aquello que el tiempo no te ha dejado disfrutar. Por los que se fueron, que no volverán, pero jamás se marcharán.

davoML