El momento perfecto para cambiar la dinámica
El Real Madrid se juega prácticamente la vida en Europa esta noche ante el Gladbach. El conjunto de Zinedine Zidane necesita los tres puntos para no complicarse mucho en un grupo que perfectamente podría ser calificado como el "grupo de la muerte". Tras la mala imagen del partido en Valdebebas ante el Shakhtar Donetsk, los blancos no se pueden permitir otra cosa que no sea una victoria, y menos teniendo en cuenta lo que viene en un futuro no tan lejano, dos partidos seguidos contra el que supuestamente es el 'coco' del grupo, el Inter de Antonio Conte.
La hoja de ruta está perfectamente marcada, lo que vimos en el clásico debe ser el camino a seguir durante el resto de la temporada y sobre todo en términos de actitud. Esa unión, ese compromiso del equipo de principio a fin, incluso en los instantes en los que el Barcelona llevaba la iniciativa provocaron el revolcón final que supuso un gran despliegue futbolístico, con ocasiones claras de gol y ante el que nada pudo hacer el conjunto de Koeman.
La vieja guardia sigue teniendo fútbol para rato, y no es que en los partidos de desconexión se les haya olvidado jugar al fútbol, es una cuestión de actitud, y lo demuestran cada año cuando llega el clásico y tornan la situación. Pero no vale solo con una cita clave. La primera 'final' es esta noche y los de Zidane deberán salir a morder ante un equipo que es muy peligroso. Sin relajaciones, es el momento de cambiar la dinámica y coger impulso para lo que viene.