Lisboa jamás tendrá revancha

20.03.2015 14:30 de  Jorge Calabrés  Twitter:    ver lecturas
Lisboa jamás tendrá revancha
© foto de Jorge Calabrés

No hay dos partidos iguales y mucho menos dos finales idénticas. Para decepción del Atlético, el fútbol no funciona con las reglas del boxeo. El Real Madrid no pone en cada encuentro su corona en juego. Por tanto, no habrá revancha de la final de Liga de Campeones de la pasada temporada. Ya pasó, la ganó el Real Madrid. Esa 'Orejona' posa con orgullo junto a sus nueve hermanas. Mala suerte, 'Cholo'. El minuto 93 ya es historia del fútbol gracias a la cabeza de don Sergio Ramos García. Lisboa jamás será rojiblanca. 

El Atlético, el equipo de pueblo y de gran parte de la prensa, contra el Real Madrid. Otro derbi, otra batalla. Pase lo que pase, los de blanco serán los malos. Y esto es el madridismo: ganar, ganar y volver a ganar contra todos. Solos, sin apoyos. Culés y antimadridistas de toda España se unirán a la causa para derrocar al vigente campeón de Europa. Ancelotti tiene una gran oportunidad para reivindicarse. Una victoria en cuartos contra el vecino y eterno rival sería un buen golpe de autoridad. El italiano puede ganarse de nuevo la confianza de directiva y afición ante el conjunto que tambaleó los cimientos de su proyecto tras el 4-0 en Liga. Simeone tiene tomada la medida al de Reggiolo esta campaña. Cuatro victorias de los colchoneros y dos empates es el balance actual. Pero al igual que sucediera en 2014, la contienda más importante llegará en la competición continental. De poco o nada han servido al Atleti sus triunfos ante el Madrid. Sí, se llevó la Supercopa de España, pero en Liga está fuera de la lucha por el título y en Copa cayó ante el Barcelona. Victorias estériles por consiguiente. Esta eliminatoria de Liga de Campeones será a vida o muerte tanto para el Atlético... como para Ancelotti. 

La capital es blanca, al igual que España o Europa. 10 Champions y 32 Ligas tienen culpa de ello. No, el Atlético no manda en Madrid por unos míseros partidos. Aquí el que quiera superar al Real Madrid y mirarle por encima del hombro tiene mucho que remar. La supremacía madridista no llegó a base de derbis sino de títulos conquistados. Dos clubes con filosofías lejanas y objetivos distintos. Mientras que para el Atlético el ganar al Real Madrid salva la temporada, para la entidad presidida por Florentino Pérez solo vale añadir más copas a unas vitrinas ya abarrotadas. Por eso el primero es un gran club y el Madrid, el mejor del mundo. Así de simple.