Manual de instrucciones para Gareth Bale

23.08.2013 00:00 de  Redacción   ver lecturas

Querido Garethito:

Por fin estás aquí. Lo primero que quiero hacer es darte las gracias por el esfuerzo que has hecho para venir. Debes saber que ese simple gesto ya te ha hecho merecedor de tener el respeto de toda la afición madridista. O al menos de casi toda, porque, como podrás observar en cuanto pises la capital, en este club tenemos una afición realmente peculiar. Por ese mismo motivo y otros que no voy a entrar a detallar, a continuación te adjunto un pequeño manual de instrucciones que te será de mucha ayuda a la hora de adaptarte al Real Madrid.

Mourinho no existe, nunca ha pasado por aquí y nunca le has visto. Si te preguntan, no le conoces y, por supuesto, ni le admiras ni te gustaría tenerle como entrenador. Para decir esas herejías debes llevar mucho tiempo aquí o, como mínimo, calzar la misma talla de escroto que nuestros queridos Arbeloa y Xabi Alonso. Esta norma es la más importante, y la que te permitirá mantenerte a salvo aquí, por lo menos el primer año.Aquí el entrenador solo está para llevar el cronómetro y lucir chándal. La prensa y ciertos jugadores son los encargados de llevar la batuta, de tomar las decisiones y de juzgar a los tránsfugas que osen a desafiar sus normas.La campechanía y el señorío están por encima de todo. Este no es un club de barrio, no somos unos cualquiera que protestan ante las injusticias y que pitan al eterno rival en su propio estadio. Aquí, una vez cada cierto tiempo aplaudimos al rival, como debe ser, y si se ríen de nosotros y nos la meten doblada nos callamos.

La afición no está ahí para animarte ni para levantar al equipo. O qué te has creído tú, chaval. Aquí no somos como los bárbaros y borrachos ingleses. Señorío, elegancia, pipas y silencio es lo que encontrarás, salvo honrosas excepciones, en el Santiago Bernabéu. Los que animan y cantan son, por lo general, brutos, paletos y radicales.En el Real Madrid no debe jugar quien lo merece. Se juzgará tu trayectoria y tus éxitos del pasado, y en los entrenamientos podrás hacer lo que quieras porque, para el caso, no contará para nada ni para nadie.Es aconsejable no hablarlo todo abiertamente con tus compañeros, ya que las palabras vuelan del vestuario a la prensa antes de que te des cuenta. En cuanto a los jugadores de los que puedes fiarte, es mejor no desvelarte nada todavía y que aprendas algo por ti mismo, que no voy a dártelo todo hecho, campeón.

Por el momento, y para ser el primer día, creo que con estas pequeñas pautas puede ser suficiente. Sé que quizás no es lo que esperabas, pero espero no haberte desilusionado y que no eches patas a la primera de cambio. El próximo día te enviaré también los teléfonos de algunas personas influyentes, periodistas la mayoría, a los que deberás llamar de inmediato y mostrarles todo tu respeto si quieres evitar que los pupilos de Goebbels hagan de las suyas contigo.

Por último, quiero que sepas que esto es únicamente por tu bien. Puedes cumplir este manual de instrucciones o lanzarlo al cubo de la basura, pero si eliges la segunda opción atente a las consecuencias, porque yo no podré hacer nada para ayudarte. Sin más, me despido de ti y te deseo una estancia muy feliz en el Real Madrid.

Atentamente,

Javier Díaz-Berrio

PD: Te adjunto también un sobre con la pulsera de Mediaset para que puedas tocar madera. ¡Disfrútala!