El inminente regreso de Hazard planteará un dilema a Zidane

Bernabeudigital.com

Algo más de dos meses después, Eden Hazard está prácticamente a punto de volver a plantar sus pies sobre el césped. Sabiamente, Zidane no se la juega, y tras tanto tiempo en el dique seco ha preferido no incluirle en la relación de futbolistas citados para recibir a la Real Sociedad. En un partido de moneda al aire, un jugador diezmado puede suponer inferioridad en el tablero, y su hueco en el banquillo puede ocuparlo otro activo en disposición de disputar los minutos que se estimen. LaLiga puede ser otra historia, y en Pamplona puede haber chupinazo con el regreso del belga.

Pero su vuelta a los terrenos citará a Zinedine Zidane con una disyuntiva interesante, de esas con las que todo entrenador quiere contar por el exceso y no por el defecto. Al nivel que está Vinícius y si el brasileño lo prorroga en el tiempo, 'Zizou' tendrá que gestionar el estatus de constelación del '7' con el buen hacer del imberbe carioca, que por momentos llama a la reminiscencia de hace un curso con Solari. Por estas fechas pilotaba un barco naufragado, y no precisamente por impericia propia. Lo cierto es que el francés no ha demostrado hasta ahora una predilección obsesiva por el ex de Flamengo, pero es igual de verdad que hasta hace no mucho sus prestaciones se habían aletargado. Por aquello de que si eres joven pero no tienes la suerte de apellidarte Mbappé, impactas. pero lo complejo es prolongarlo en el tiempo. Pero este Vinícius es el que todo el mundo esperaba. Buenos minutos de chirigotas por banda ante el Sevilla, delicia en La Romareda y comparecencia clave en el derbi para decidir en la génesis del 1-0. El retorno de Hazard, según en qué condiciones, podría eclipsarle o condenarle de nuevo a la diestra, posición prohibida para él. Bendito problema, Zinedine.